Pueblos itálicos

Los pueblos itálicos llamados también ítalos son un grupo de pueblos indoeuropeos que habitaron la península itálica y hablaban las lenguas itálicas. Se cree que se originaron en la región de Europa central y se desplazaron hacia el sur, llegando a la península itálica. La evidencia arqueológica y lingüística sugiere que estos grupos llegaron a Italia durante la Edad del Bronce, aproximadamente en el siglo XIII AEC, en el contexto de la Cultura de los Campos de Urnas, donde se establecieron y contribuyeron al desarrollo de las culturas pre-romanas en la región.

Las tribus itálicas son los latinos, faliscos, umbros, oscos, sicanos, sabinos, vénetos, hérnicos, sículos (¿ilirios?).

Existe confusión, especialmente en literatura no especializada, al incluir entre este grupo a otros antiguos pueblos no indoeuropeos que eran habitantes nativos de la península itálica y anteriores a las invasiones indoeuropeas como los etruscos. A éstos debemos referirnos como pueblos preindoeuropeos de Italia o pre-itálicos.

Migraciones indoeuropeas

Italia estaba densamente habitada al menos desde el Neolítico. La difusión de las tecnologías metalúrgicas al parecer se dio por las migraciones de nuevas poblaciones indoeuropeas. Modernamente se distinguen cuatro oleadas de migraciones a través de los Alpes septentrionales:

1. Una primera oleada migratoria, probablemente indoeuropea se dio hacia el III milenio AEC. Son características de este periodo las estelas o estatuarias de tipo menhir, que frecuentemente llevaban grabados signos solares, aparentemente signos distintivos indoeuropeos.
2. Una segunda oleada entre el final del III milenio y los inicios del II milenio AEC llevó a la difusión de poblaciones asociadas a la cultura del vaso campaniforme y del bronce en la llanura padana, en Etruria y en las zonas costeras de Cerdeña y Sicilia.
3. Hacia la mitad del II milenio AEC, una tercera oleada cultura de las terramaras y quizá a pueblos latino-faliscos que difunden el uso del hierro y la incineración de los muertos.
4. Hacia el final del II milenio y la primera mitad del I milenio AEC, se da la cuarta oleada asociada a la cultura de los campos de urnas y las pueblos osco-umbrios (probablemente también a los latino-faliscos), leponcios y vénetos.