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Luna (niña sueca)
Luna ( 2013) es una niña sueca que sobrevivió al ataque de un invasor etíope de 15 años quien la violó y la estranguló con los cordones de los zapatos de la niña, abandonándola a que muriera. Luna pasó 2 meses en coma y sufre daño cerebral permanente y lesiones que alteran su vida: una columna rota y hemorragias internas por la violación.[1]
Luna, de 9 años, fue atacada el 7 de julio de 2022 en Skellefteå, Suecia, mientras regresaba a casa desde la escuela.
Esta trágica situación generó gran conmoción y debate en Suecia y en otros lugares.
A Luna le encantaba pasear en bicicleta, y su tía la describe como artística: "ama cantar y bailar". Cantó un solo en el coro de la iglesia local.
No se ha revelado públicamente el apellido completo de Luna para proteger su privacidad y la de su familia.
Sumario
El ataque
Eran alrededor de las 15:20 del 7 de julio de 2022 cuando Luna salió de la escuela rumbo a su casa en Morö Backe en Skellefteå. Ese mismo día, el etíope de 15 años ya había merodeado por el patio del colegio sin tener nada que hacer allí.
El negro la detuvo mientras iba en bicicleta, la llevó a una zona boscosa, la violó y la estranguló con los cordones de zapatos de ella. La dejó desnuda atada a un árbol, donde fue encontrada inconsciente horas después al borde de la muerte.
Alrededor de las 15:30 horas, un testigo escuchó un grito proveniente del bosque. Poco después de las cuatro de la tarde, el negro fue visto nuevamente en el patio de la escuela.
Se describió el comportamiento del negro en la escuela, incluidos incidentes documentados de carácter sexual hacia las niñas. Pero ese día, fue visto como un joven ocioso en vacaciones de verano.
A un estudiante le habían robado su scooter eléctrico y el etíope se ofreció a ayudar en la búsqueda. Lo encontró rápidamente y hay informes de que él mismo lo robó y, por lo tanto, le resultó fácil encontrar el scooter.
No fue hasta las 17:28 que llegó la llamada de alarma a SOS. Luego, el negro de 15 años intentó detener a varias personas en el camino para que se reunieran con él en el bosque. La mujer que finalmente llamó trajo a su hija, de la misma edad que Luna.
La patrulla policial que se encontraba en el lugar notó el comportamiento del negro de 15 años y ya esa misma noche se llevó a cabo el primer interrogatorio en su casa. También contó la historia de cómo encontró a la niña en el bosque cuando iba a orinar, a pesar de que Luna estaba a 30 metros de la carretera en un terreno de difícil acceso. Cuando supo que Luna estaba viva se sorprendió, ya que creyó haberla asesinado.
Estado médico de Luna
Luna sufrió un grave daño cerebral permanente debido a la falta de oxígeno durante el estrangulamiento. La niña estuvo en coma con un respirador por un periodo de dos meses. Como resultado, ahora tiene discapacidades severas, incluyendo la incapacidad para hablar, mover brazos y piernas o realizar actividades diarias sin asistencia.
Luna ha estado en rehabilitación continua, pero los avances han sido limitados. Solo ha logrado decir una palabra, "mamá", desde el ataque.
El agresor
El adolescente negro, identificado como Abushi Shamse Kamal, llegó a Suecia en 2017. Con solo 15 años, había mostrado comportamientos problemáticos antes del ataque. Las autoridades ya lo conocían por varios casos de agresión sexual que se remontan a 2019 y 2021. Había sido reportado en tres ocasiones por acoso sexual y agresiones físicas en su escuela, y aunque el centro escolar contactó con sus padres, estos no hicieron nada por evitar que su hijo continuase con esta conducta. En 2021 fue investigado por un intento de agresión a una mujer adulta. Sin embargo, estos incidentes no fueron adecuadamente gestionados por las autoridades. Como el inmigrante etíope no era mayor de edad, la investigación fue derivada a servicios sociales, pero no se hizo nada más.
El 30 de junio de 2022, una semana antes del brutal acto, a Shamse se le concedió el permiso de residencia permanente en Suecia, alegando que huía de una persecución étnica en Etiopía.
Durante el juicio, los agentes revelaron que Shamse Kamal también había fue reprendido por utilizar los ordenadores del colegio para la búsqueda de películas y materiales violentos y pornográficos que contenían imágenes de estrangulamientos. El colegio no tomó ninguna medida más allá de una simple reprimenda.
Fue sentenciado a atención psiquiátrica forense por intento de asesinato y violación agravada de menores, aunque no está claro cuánto tiempo estará detenido.
Reacciones y acciones posteriores
La familia de Luna ha expresado su dolor y frustración por el ataque y las consecuencias permanentes para Luna. Su tía Emma ha hablado públicamente sobre el impacto devastador y la lucha diaria para cuidar de Luna.
La familia ha iniciado campañas para aumentar la conciencia sobre el caso y recaudar fondos para los cuidados médicos de Luna.
El caso ha llevado a discusiones sobre la necesidad de mejorar la cooperación entre las autoridades suecas. Se ha propuesto una nueva legislación, conocida como "lex Luna", para facilitar el intercambio de información entre instituciones para prevenir incidentes similares en el futuro.