Revista Cedade

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CEDADE nº 27 1971

La revista Cedade era una publicación española y nacionalsocialista que se editaba en la décadas del 70, 80 y 90 del siglo XX. Sus directores fueron Jorge Mota en una primera etapa y Pedro Varela.

"El Nacionalsocialismo es la identidad de Dios"

CEDADE 83 1978
(Extractado de la revista Cedade, Número 147, pag. 4 y 5, enero de 1987)

"He leído uno por uno los artículos que han remitido a esta redacción los jóvenes miembros de Cedade que han hecho de escritores por un día, intentando resumir a su manera lo que para ellos significa el Nacionalsocialismo.

Podran discutirse las cualidades literarias de mis camaradas, pero nadie negará que escriben con toda sinceridad -toscamente, puede ser-, pero anunciando su verdad, sus ideas, sus principios, sus sentimientos y emociones. Redactan tan sin prejuicios, que seguramente alguno de los escritos causará contrariedad y sorpresa.

Este nuevo equipo de redacción nos dice que el Nacionalsocialismo está representado por la disciplina, la familia, la belleza, el bien, la verdad, la naturaleza, la raza, el nacionalismo, el socialismo, el arte, la religión, la cultura, el regionalismo, el deporte, la salud, la tradición, una madre con niños, una juventud con caracter, un ejército popular, una economía natural...


La solución

CEDADE nº 114 1983

Yo añadiría a todo esto que el Nacionalsocialismo significa, primero de todo, la solución a los problemas sociales, del paro, de la droga, del pesimismo, de la desesperanza, de la desilusión generalizada, del egoísmo, del círculo vicioso de consumir más y más sin un respaldo humano interior, de las barriadas multitudinarias con familias hacinadas en columnas de cemento gris y sucio, del desinteres por los demas, del abandono de los débiles y los oprimidos, de la desunión con los mayores, con los pobres, de la destrucción de nuestro propio mundo y su naturaleza, de la corrupción de los partidos y sus gobiernos y la falta de dinamismo e interes en la administración por servir al propio pueblo aunque ello suponga enfrentarse a los capitostes del dinero financiero internacional, de la paz y la tranquilidad del ciudadano, de una revisión de las cárceles -metiendo en ellas a muchos de los que están fuera y sacando a los que no debieran estar- y por una solución eficaz y limpia de todas las administraciones de justicia, seguridad, hacienda, etc.

Todo esto lo soluciona el Nacionalsocialismo. Lo solucionó definitivamente. Lo volverá a solucionar. Sabe cómo hacerlo. Por lo tanto, podemos decir que, además de todo lo que nuestros jóvenes miembros dicen del Nacionalsocialismo, este dispone las cosas como tienen que ser.

Sabiendo esto, leyendo las páginas siguientes y conociendo el pensamiento que animaba a los que nos precedieron, llegamos a la conclusión de que el Nacionalsocialismo forma una cosmovisión del mundo bien completa e inspirada por un mismo motor central. Con personalidades diferentes, de épocas diferentes, todos los camaradas, ellos y ellas, los que hoy o los de entonces, tienen amor por cosas muy similares.

¿Qué nos gusta ?

CEDADE 132 1985

Nos gusta lo grande, lo claro, lo bello y transparente. Nos gustan las montañas con sus inmensos espacios abiertos, su aire fresco y puro y la soledad con lo esencial. Nos gustan los niños, las chicas femeninas y bonitas, la sensibilidad en el arte, la tensión del deportista y la fortaleza del guerrero. Nos gustan los campesinos que cuidan y aman la tierra. Nos gusta el trabajo bien hecho y las virtudes que todo un pueblo debe conseguir día a día. Nos gusta la puntualidad, el bien hacer y la gente que trabaja cantando. Nos gusta la Navidad, celebrada con recogimiento e intimidad alrededor de lo más sagrado. Nos gustan los rostros nobles y sanos de una juventud emprendedora con corazones fuertes y cuerpos espléndidos. Nos gusta la nobleza transparente de nuestro fiel perro. Nos gusta la gente amable y ayudar a los demás. Nos gusta en fin, todo aquello que de uno u otro modo forma parte de la identidad de Dios. Porque, ¿cómo podemos definir sino tantas y tantas cosas importantes cuyo aprecio nos viene directamente del sentimiento y la intuición? El Nacionalsocialismo es pues, parte de la identidad del Todopoderoso.

He leído, estudiado y admirado la vida y la obra de muchos que han luchado por esa misma idea. Conozco como si fueran amigos personales a nuestro Adolf Hitler, al Dr. Joseph Goebbels, a Rudolf Hess y a tantos otros. Todos ellos luchaban por lo mismo. La identidad de Dios, esa es la definición acertada.
CEDADE 153 1987

Y todo esto que nos mueve a nosotros, es también lo que quiere la gente. Lo sé. Es así. ¿Por qué, entonces, nos dan todo lo contrario: apatía, droga, destrucción de lo bello y lo noble, fealdad, traición, egoísmo, familias sin hijos, ciudades horrendas y hombres sin creencias?

El pueblo necesita y ha necesitado siempre que sus mejores hombres le guíen, en un consenso total de todos con todos y a su vez con sus propios jefes, surgidos del mismo pueblo, hacia la grandeza y el bienestar espiritual, la satisfacción de las necesidades materiales y todo ello, a ser posible a través de la belleza y la alegría, pero siempre mediante la lucha sin descanso.

El camarada Joaquín Bochaca describe acertadamente la historia del mundo como el enfrentamiento entre un 7 % de inteligentes malos y un 3 % de inteligentes buenos, seguidos por otro 90 % de gente sencilla que obedecerá a quien gane la batalla. Un 90 % de gente que es esencialmente sana y que por lo tanto se alegra, trabaja feliz y se ennoblece cuando vence esa minoría positiva del 3 %, pero que despotrica de todo y va pasando la vida amargada y desilusionada cuando quien se encuentra en el poder es ese 7 % de la contraélite.

El futuro

CEDADE nº 175 1991

Se suelen acabar estos comentarios diciendo que el futuro nos pertenece y que venceremos, sin más. Eso suena a frase hecha o a demagogia. Pero es que, una vez repasada esa identidad del Creador que nos mueve a todos, no puedo más que ver las cosas con optimismo. Quienes hoy gobiernan el mundo -y son responsables del estado de cosas a que nos han llevado-, no pueden estar eternamente sentados en su poltrona del dinero, mirando cómo nos destruímos unos a otros mientras ellos se enriquecen. Antes o después van a ser vencidos porque así ha sido siempre y así seguirá siendo.

Resulta material, espiritual, filosófica, teológica, económica y humanamente imposible que el Sistema actual se eternice. Yo veo claro que la victoria es posible. Pero veo también claro que ésta es del todo imposible sin miles de jóvenes dispuestos a darlo todo sin pensarselo dos veces. Si los jóvenes de la Juventud Hitleriana que se lanzaban bajo los carros de combate soviéticos ajustándose un cinturón de granadas, hubiesen parado por un instante a sopesar la utilidad de su gesto heróico, los soviéticos estarían hoy mismo en Sevilla. Veo también claro que los que gobiernan no se van a dejar echar sin destruir a su alrededor y acabar, si fuera necesario, con cuentas vidas se les opongan. Pero se les puede vencer, hoy, a la vista del siglo XXI. Sólo falta encontrar a los que deben dar el primer paso. Estarán entre nosotros? Si no lo estan, habran de estarlo.

Porque lo que resulta evidente es que el único modo de cambiar las cosas será animados del mismo espíritu que movió a quienes hicieron posible el 30 de enero de 1933. Ellos hicieron posible la prodigiosa revolución social del Nacionalsocialismo y su idea de la justicia para todos.

Pedro Varela

Luego, sus más jóvenes y mejores hijos hicieron posible que Europa entera no quedara arrollada por la marea soviética. Sólo en las Waffen SS, en 1941 pero también en 1944 y 1945, se consumieron divisiones enteras de muchachos europeos de una treintena de nacionalidades diferentes, hasta el último hombre. Ellos han hecho posible, entre otras cosas, por ejemplo, que hoy exista esta revista y este pequeño y joven movimiento que empieza. Ha valido la pena.

Mientras traducía el texto del Dr. Joseph Goebbels que abre este número de nuestra revista vivía intensamente aquella fecha histórica. Ellos lo consiguieron porque contaban con ese espíritu de lucha que les otorgaba la plena fe en una Idea que forma parte de la identidad de Dios.

Esa es la única clave. Gente capaz y consecuente llena de fe y decisión".

por Pedro Varela

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