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Exequiel Ávila Gallo
Biografía
Miembro de una familia tradicional argentina, era nieto de Santiago Gallo -gobernador de Tucumán entre 1884 y 1886- y sobrino de Vicente Gallo -importante figura política nacional. Estaba emparentado también con el sacerdote católico Pedro León Díaz Gallo, uno de los firmantes del Acta de la Declaración de la Independencia Argentina en 1816.
Ávila Gallo se formó como abogado en la Universidad Nacional de Tucumán, donde fue muy activo políticamente como dirigente estudiantil.
En 1960 oficiales de inteligencia del Estado de Israel secuestraron y fugaron a Adolf Eichmann, violando así la soberanía argentina. Ávila Gallo, consternado por la agresión sionista contra su país, investigó acerca del asunto y llegó a la conclusión que fue gracias a la intervención de Abraham Rosenberg (un diputado provincial de la Unión Cívica Radical Intransigente) que los israelíes habían logrado identificar al alemán, puesto que el político sionista le había facilitado documentación confidencial a Simon Wiesenthal que el Estado tucumano conservaba de la época en que Eichmann había vivido en la provincia. Por ende denunció a Rosenberg para que fuese juzgado por su traición a la patria, pero terminó siendo perseguido y encarcelado por el gobierno.
Tras su liberación, el abogado asumió la tarea de investigar acerca de la presencia del sionismo en la Argentina, enfocándose principalmente en el mecanismo de fuga de capitales que habían montado los empresarios judíos que operaban en el país con complicidad del gobierno. A raíz de ello escribió numerosos artículos publicados en los diarios regionales -especialmente en las páginas de Noticias- en los que develó de qué manera la economía nacional estaba siendo destruida para financiar a la entidad sionista de Oriente Medio.
Su inquisición lo llevó a entrar en contacto con Walter Beveraggi Allende y Jacques Zoilo Scyzoryk, otros investigadores interesados en el fenómeno de la colonización sionista que estaba ocurriendo en la Argentina. En 1972 su nombre adquirió fama mundial al presentar una denuncia formal ante el Poder Judicial para que se investigue acerca del Plan Andinia, un proyecto sionista para apropiarse de la Patagonia. La DAIA, principal órgano del lobby israelí en la Argentina, condujo una campaña judicial y mediática para desprestigiarlo, pero no pudieron amordazar al abogado.
Afiliado desde su juventud al partido conservador Defensa Provincial-Bandera Blanca, en 1978 pasó a liderar a la agrupación tras el fallecimiento de Isaías Nougues.
Fue candidato a diversos puestos electivos en varias elecciones, pero falló a la hora de conseguir el apoyo popular. La excepción se produjo en 1987, cuando declinó su candidatura a gobernador de Tucumán para cedérsela a Antonio Domingo Bussi, uno de los comandantes del Operativo Independencia: tras hacer una estupenda elección a nivel provincial, Ávila Gallo aprovechó la figura de Bussi para promocionar su candidatura a diputado nacional, accediendo así a una banca en el Congreso de la Nación que ocupó hasta 1991. Durante sus años de legislador nacional se destacó por su oposición tanto a Raúl Alfonsín como a Carlos Menem. Posteriormente se enfrentó a Bussi, quien construyó su propio partido y lo excluyó del mismo.
Se mantuvo activo en política hasta el día de su muerte. En la última década de su vida le tocó batallar contra José Alperovich, un empresario que fue consagrado gobernador de Tucumán en 2003 con el apoyo del Partido Justicialista. Lo combatió desde el primer momento, advirtiendo que las conexiones del sujeto con Israel lo convertían en un peligro para la soberanía nacional (incluso presentó una impugnación de su candidatura porque Alperovich no respetaba el artículo de la Constitución Provincial que indicaba que el gobernador provincial debía profesar la fe católica); ello derivó en una persecución de su persona a través del INADI. Fue uno de los pocos políticos que litigó contra la abolición de la bandera de Tucumán, la cual finalmente se produjo debido a que un grupo de sionistas la consideraba ofensiva por tener el dibujo de una cruz.