Lope Díez Aux de Armendáriz y Saavedra

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Lope Díez de Aux de Armendáriz y Saavedra, I Marqués de Cadereyta (Quito, actual Ecuador. 1575 - † 1640 (?) ). Fue un noble y el primer criollo que llegó a ser Virrey de la Nueva España, cuyo cargo ejerció de desde el 16 de septiembre de 1635 hasta el 27 de agosto de 1640.

Biografía

Nacido en el Virreinato de Nuevo Toledo, Lope Díez de Aux de Armendáriz y Saavedra provenía de una familia noble radicada en la ciudad de Quito actual capital de la República del Ecuador, donde su padre ejerció el cargo de Presidente de la Real Audiencia.

Realizó sus estudios en carrera naval. Ocupó cargos importantes y obtuvo también grados importantes como el de Comandante de las Escoltas que acompañaron a las flotas mercantes de España que llevaban las mercancías y riquezas de las colonias a la metrópoli.

Casado con Antonia de Sandoval, III condesa de la Torre y pariente del poderoso duque de Lerma, era gentilhombre del rey Felipe IV de Habsburgo y general dela Flota de Indias. Primer marqués de Cadreita o Cadereyta, desde 1617, llegó a ser miembro del Consejo de Guerra y embajador extraordinario ante el Sacro Imperio Romano Germánico.

Virrey de la Nueva España

EL 19 de abril de 1635 el Rey Felipe IV le asignó el cargo de Virrey de la Nueva España. La entrada formal a la Ciudad de México fue el 16 de septiembre de 1635 tomando cargo ese mismo día. le dio prioridad importante a la tarea de continuar con la construcción de los trabajos de drenaje para salvaguardar la ciudad de las inundaciones así como de las obras de reparaciones en la ciudad causadas por la inundación reciente.

El 17 de enero de 1637 un terremoto destruyó algunos avances de las obras del desagüe, particularmente a la altura de la zona del túnel de La Quemada. El virrey llamó en dos expertos, Fernando de Zepeda y Hernán Carillo, para que le aconsejaran en lo referente a las obras. En marzo del año siguiente, se determinó la abertura de un canal para substituir el túnel. El virrey, en la consulta con el gobierno municipal, la Real Audiencia y los gremios, aprobó la construcción de un canal aprovechando enorme fisura de Nochistongo. Este canal resultó muy provechoso en el control de inundaciones, y fue ampliado luego por el gobierno independiente en el siglo XIX.

Una Bula promulgada por el Papa Urbano VIII el 22 de abril de 1639 prohibió la esclavitud en las colonias de España y Portugal en América. La medida fue aprobada por el Rey de España Felipe IV sobre los indígenas, pero permitió la esclavitud de los esclavos africanos. Muchos de éstos esclavos, conocidos como Cimarrones consiguieron su libertad al escaparse y refugiarse en las montañas, sobre todo en la porción actual de lo que es el estado de Veracruz.

Defensor de la Hispanidad

Para proteger a los habitantes y colonos del Nuevo Reino de León (el actual territorio del estado mexicano de Nuevo León) de los ataques y saqueos provocados por las tribus indígenas de Apaches y Comanches, Lope Díez de Aux de Armendáriz ordenó la construcción de un presidio en Cadereyta, y otra fortificación de igual nombre en Cadereyta. También ordenó una expedición a las Californias, la cual tuvo un resultado desastroso.

Obras

Una de las medidas que tomó en la capital del Virreinato fue la limpieza de los diques y canales que en ese tiempo atravesaban la ciudad. Fundó el Convento de San Bernardo y el Hospital del Espíritu Santo. También creó la Armada de Barlovento, con sede en el Puerto de Veracruz, cuyo fin dado era el de proteger a la flota española del ataque de los piratas.

Armada de Barlovento

Se destacó de manera especial este noble quiteño, por haber sido el fundador de la Armada de Barlovento, que fuera una institución militar creada por el Imperio español para proteger sus territorios ultramarinos americanos de los ataques de sus enemigos europeos, asimismo como de piratas y corsarios. Esta Armada fue la primera institución naval creada en América, por tanto Lope Díez Aux de Armendáriz y Saavedra es el precursor de todas las Fuerzas Navales del continente americano.

De esta forma, este quiteño se erigió como el símbolo de la hispanidad tradicional en lucha y ataque contra el naciente capitalismo filibustero, rapaz y subversivo que hervía en las entrañas de la "Pérfida Albión" también conocida como Inglaterra, ya para entonces con enorme influencia judía.

Finalmente por raros y extraños sucesos e influencias fue acusado de muchas irregularidades y defectos por sus enemigos, entre ellos el Obispo de Puebla, Juan de Palafox y Mendoza.

Artículos relacionados

Bibliografía

  • Manuel García Puron (1984). México y sus gobernantes. Joaquín Porrúa.
  • Fernando Orozco Linares (1985). Gobernantes de México. Editorial Panorama. ISBN 968-38-0260-5.