Lega Nord

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Lega Nord (Liga Norte) es un partido político de Italia liderado por Mario Borghezio y cuyo propósito es el de garantizar mayor autonomía a las entidades regionales del gobierno central, especialmente a las áreas del norte italiano que es donde este partido político está presente.

Propone la separación del norte italiano del resto de Italia y formar una nación independiente: Padania, con lo que apoya de esta manera la independencia de Cataluña. La liga quiere reducir el número de inmigrantes que entran a Italia.

Inmigrantes

La Liga Norte se presenta totalmente contraria a la inmigración en Italia. El partido político ha estado constantemente envuelto en controversias. En un comienzo, en 2003, la Liga exigió que los trenes tuvieran vagones separados para los inmigrantes, en 2001 el propio Bossi, que ocupaba un ministerio, proponía prohibir la entrada a Italia a los inmigrantes musulmanes, Luca Zaia instó a negar la escolarización a los inmigrantes y en 2013, el vicepresidente del Senado italiano, Roberto Calderoli, bromeó con la ministra de integración negra Cecyle Kyenge, comparándola con un orangután, quien estaría fomentando la inmigración en Italia, "Me encantan los animales, los osos, los lobos, como todo el mundo sabe, pero cuando la miro, me viene a la cabeza un orangután".

Tras la victoria de Italia contra Francia -en la final de la Copa del Mundo 2006-, Calderoli criticó a Francia por haber "sacrificado su identidad por los resultados al enviar a negros, musulmanes y comunistas". En junio de 2008, Calderoli dijo en una entrevista televisiva: "Es obvio que hay grupos étnicos y poblaciones que están más inclinadas a trabajar y otras no, hay una mayor predisposición para el crimen mas por parte de unos que de otros".

En 2007, un concejal de Treviso, Giorgio Bettio, comentó que «Tenemos que usar los mismos métodos que los nazis de las SS, castigar a diez por cada daño que sufra uno de nuestros vecinos». Tras saltar a la prensa, la Liga Norte lo desautorizó, la Fiscalía abrió una investigación y Bettio pidió disculpas. Alegó que llegó caliente al pleno porque su madre tiene roces con un vecino extranjero. «Ha sido una expresión dictada por la rabia, es grave, pero creo que sea humanamente comprensible», explicó. «La 'mamma' es la 'mamma'», concluyó. El anterior alcalde de Treviso bromeo y propuso «disfrazar a los inmigrantes de liebres para ejercitar a los cazadores» ya que el gobierno estaría dejando solos a los alcaldes frente a la inmigración ilegal.

La cruzada la empezó el alcalde de Citadella con una orden que prohíbia la residencia a inmigrantes sin trabajo o con ingresos menores a 5.000 euros anuales. La Fiscalía estudió abrir un proceso, pero otros 50 municipios del Veneto o Novara, en Piamonte, van a adoptar la idea. También, como otros alcaldes, organizaba rondas nocturnas de vigilancia de voluntarios para controlar la delincuencia y violaciones de los inmigrantes. Otro alcalde, en Caravaggio, no casaba a inmigrantes sin permiso de trabajo y en Montegrotto pusieron en las pantallas públicas un mensaje de protesta que invita a los vecinos a emigrar porque allí "ya no se puede vivir".

Otro ejemplo es el eurodiputado Mario Borghezio, que prendió fuego a un asentamiento de inmigrantes bajo un puente de Turín en el 2000 para evitar que siguieran llegando. Fue condenado y pasó a acciones simbólicas, como rociar con desinfectante a africanas en los trenes.

Si bien esto fue en el pasado, actualmente -debido principalmente al foco internacional que hay sobre ellos- han rebajado considerablemente su discurso, pese a perseguir las mismas intenciones identitarias.

Gitanos

Un grupo de gitanos con nacionalidad rumana abandonan su campamento escoltados por la policía italiana en 2006.

Los gitanos son un verdadero problema en Italia, particularmente en el norte, donde roban y delinquen continuamente. Esto ha llevado a la población y a la Liga Norte –e incluso a partidos de centro- a proponer y llevar a cabo políticas duras contra los mismos.

En 2008, el ministro del Interior italiano, Roberto Maroni, anunció que el Consejo de Ministros aprobaria otorgar a los prefectos (delegados del Gobierno) de Milán, Roma y Nápoles poderes especiales para afrontar la llamada emergencia gitana. La primera medida será elaborar un censo exhaustivo de los habitantes de los campamentos. Para ello, Interior movilizará a todos los prefectos de Italia: "Quiero saber cuántos campamentos hay provincia por provincia, y quién está dentro", afirmó Maroni. "Antes de fin de año resolveremos el problema de los campamentos gitanos abusivos, lo cual significa que se respetarán las leyes"

El ministro comentó que en los campamentos gitanos "hay gente de bien que vive en condiciones miserables, y muchos menores de edad". "Naturalmente", añadió, "no entraremos con las excavadoras y los destruiremos, pero hace falta encontrar una solución". El Ministerio del Interior calculó que había unos 152.000 gitanos viviendo en Italia, de los cuales el 37% tenían la nacionalidad italiana. Al menos el 50% eran niños y adolescentes que, en su mayoría, habían nacido en territorio italiano, sin embargo, Maroni comunicó posteriormente que estaban "ultimando los cálculos", y que pensaban que serían "unos 120.000, pero son menos", en su opinión porque se habían ido "voluntariamente a la más permisiva España de Zapatero".

Las organizaciones judías Amnistía Internacional y Liga Antidifamación, alertaron de que Italia corría el riesgo de "ignorar el principio de responsabilidad individual" al legislar de manera específica sobre "grupos y minorías según su nacionalidad, su etnia o el sitio donde viven".

Islam

En 2001, Umberto Bossi, propuso prohibir la entrada de musulmanes en Italia. El 8 de febrero de 2006, el ministro de Reforma italiano -miembro de la Liga Norte- Roberto Calderoli, hizo declaraciones favorables al uso de la fuerza contra los musulmanes y solicitó la intervención del Papa Benedicto XVI para formar una "coalición", haciendo referencia a las batallas de Lepanto y Viena. 7 días después llevó una camiseta con viñetas de Mahoma durante una entrevista en directo. Aunque la prensa informó que era una de las caricaturas de Jyllands-Posten, en realidad era la caricatura publicada en la portada del Soir de Francia del número 1 de febrero de 2006, Calderoli no mostró una de las caricaturas que causó la crisis internacional.

Calderoli dijo a la agencia de noticias “Ansa” que Occidente tenía que hacer frente ante el extremismo islamista y ofreció distribuir las camisetas a quien las quiera. "Tengo camisetas con las viñetas que han molestado al Islam y voy a empezar a llevarlas hoy", dijo Calderoli a la agencia italiana.

Calderoli añadió que las camisetas no eran una provocación y añadió que no tiene sentido intentar apaciguar a los extremistas. "Tenemos que poner fin a esta historia de que podemos hablar con esa gente. Ellos sólo quieren humillar a la gente. Punto. ¿Y en que nos estamos convirtiendo? ¿En una civilización de mantequilla?", afirmó Calderoli.

El evento fue ampliamente publicado en Libia (una antigua colonia de Italia), y unas 1.000 personas se reunieron para una protesta y comenzaron a tirar piedras y botellas al consulado italiano en Benghazi, que incendiaron. En enfrentamientos con la policía, al menos once personas murieron y veinticinco resultaron heridas.

Posteriormente, Silvio Berlusconi pidió a Calderoli que renunciara porque su acto era contrario a la línea política del gobierno, pero, en una entrevista concedida al periódico italiano La Repubblica, Calderoli declaró que no renunciaría. Eventualmente cedió ante el presión masiva proveniente de todas las partes y dimitió el 18 de febrero de 2006.

Se tiene constancia de que Calderoni como vicepresidente del Senado se paseara con un cerdo entre por el solar donde se va a construir una mezquita en Bolonia, para dejarlo impuro y evitar las obras.

Referencias

Artículos relacionados

• Mario Borghezio
• Maurizio Blondet
• Padania

Enlaces externos

• Sitio Oficial

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