Sam Melia

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Sam Melia

Sam Melia es un activista patriota y padre de familia de Reino Unido, organizador en Yorkshire del grupo nacionalista Patriotic Alternative. Melia había creado un grupo llamado Hundred Handers en el canal de redes sociales Telegram. Allí distribuía pegatinas imprimibles y alentaba a sus seguidores a descargarlas y colocarlas en lugares públicos.

En abril de 2021 fue arrestado y a principios de 2024 fue sentenciado a dos años de prisión sólo por difundir y colocar estas pegatinas que expresaban sus ideas problancas y nacionalistas.[1]

Lemas de las pegatinas

Los lemas de las pegatinas contenian frases como:

  • "Está bien ser blanco" (It's ok to be White).
  • "Las vidas de los blancos importan" (White Lives Matter).
  • "Seremos minoría en nuestro propio país para 2066".
  • "Inmigración masiva es genocidio blanco".
  • "¿Por qué los judíos censuran la libertad de expresión?".
  • "Rechacemos la culpa blanca".
  • "El nacionalismo es educación (¿es un crimen ser nacionalista ahora?)".

Arresto y sentencia

Melia fue arrestado en abril de 2021 y La Fiscalía de la Corona (CPS), en su resumen del caso, dijo que cuando registraron su casa, la policía encontró en su billetera las pegatinas que expresaban "opiniones de naturaleza nacionalista", así como un emblema que representaba un águila con las alas extendidas sobre una esvástica. También descubrieron un libro de Oswald Mosley y un póster de Adolf Hitler. En el tribunal, dice la CPS, estos artefactos se ofrecieron como "signos clave de la ideología de Melia".

En enero, el Tribunal de la Corona de Leeds declaró a Melia "culpable de distribuir material destinado a fomentar el odio racial" y "fomentar los daños criminales agravados por cuestiones raciales", y recibió una sentencia de dos años de cárcel.

Su esposa, Laura Towler, afirmó que Sam Melia es un preso político, e informó que el estado y la prisión de Hull le han prohibido tener contacto con sus hijos mientras esté en prisión. No sólo eso, sino que no se le permite llevarle fotografías de sus hijos y ni siquiera se le permite a su esposa mencionarlos cuando habla con él. Después de haber cumplido tres meses de su condena, el sistema decidió que Sam es "una persona que representa un riesgo para los niños" (Person Posing Risk to Children, o PPRC, por sus siglas en inglés) debido a los "carteles, insignias y literatura racistas" y a las "actitudes racistas y ofensivas" de Sam.

Doble rasero

Melia fue arrestado por querer difundir sus ideas de preservación colectiva, lo cual representa un ataque a la libertad de expresión y de conciencia. El hecho de que Melia haya recibido una sentencia más dura que otros por delitos reales y mucho más graves es un testimonio de la tiranía progresiva de la Gran Bretaña del siglo XXI. Se ha evitado la cárcel a gente que ha agredido sexualmente a mujeres, violado niñas o descargado material de abuso sexual infantil.

  • Hawkar Shwani, un invasor iraquí se salvó de la cárcel después de manosear a mujeres en lugares públicos porque estaba "desesperado por tener sexo".[2]
  • Abdul Shokoor Ezedi, un inmigrante ilegal de Afganistán fue declarado culpable de agresión sexual y exposición indecente en 2018. No cumplió ni un minuto en la cárcel. Fue condenado a 36 semanas de prisión, pero la pena fue suspendida durante dos años.[3] Se le concedió el asilo en 2020 después de tres solicitudes, y en 2024 llevó a cabo el horrible ataque con ácido en Clapham contra una madre y sus dos hijas pequeñas de ocho y tres años.[4]
  • Hamoud Al-Soaimi, de Byker, miembro de una pandilla junto con la que repetidamente violó a una niña de 12 años entre 2018 y 2019, fue liberado del tribunal después de recibir una sentencia en suspenso de dos años.[5]
  • Manzoor Akhtar, miembro de una pandilla de acosadores, fue condenado en 2020 a tan solo cuatro años de cárcel por violar a una niña de 13 años durante 2005 y 2006.[6]
  • Mohamed Bakari Shei, un invasor que violó a dos niñas en el condado de Olmsted fue sentenciado a sólo 180 días de cárcel. Su acuerdo de culpabilidad preveía que no pasaría tiempo en prisión.[7]
  • Adil Rashid, que violó a una niña de 13 años fue librado de una pena de prisión por el Tribunal de la Corona de Nottingham después de afirmar que "no sabía que era ilegal" y que "su educación musulmana no le enseñó a respetar a las mujeres".[8]
  • Balal Khan, un paquistaní que golpeó, robó y violó a una joven inglesa de 20 años, fue sentenciado a sólo 3 años de cárcel. Atacó a su víctima cuando se dirigía a su casa y la dejó desnuda y golpeada en la calle. Luego le robó el teléfono y respondió a una llamada del novio de la chica para alardear de lo que había hecho.[9]
  • Lawson Natty, uno de los dos negros acusados del asesinato de Gordon Gault, de 14 años, en noviembre de 2022, fue liberado apenas seis meses después de ser sentenciado a dos años, debido al hacinamiento en las prisiones.[10]

El caso Melia, así como de otros patriotas, arroja una luz implacable sobre la hipocresía de las élites censuradoras y de los izquierdistas que las alientan ya que, aparentemente, pegar pegatinas es más grave que agredir a las mujeres o asesinar blancos.

No hace falta estar de acuerdo con ninguna de sus opiniones para encontrar esto absolutamente escalofriante. La falta de conciencia de sí mismos entre los izquierdistas que se jactan de este encarcelamiento de un fascista es increíble. Imagine acusar a otros de fascismo mientras aplaude y vitorea el encarcelamiento de un hombre por lo que piensa y dice. Las ollas y las teteras vienen a la mente. Eso es lo que realmente pasó aquí: un hombre fue encarcelado por sus creencias. Las autoridades no tienen reparos en decirlo.

—Brendan O'Neill, redactor político de Spiked, 4 de marzo de 2024

Referencias

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