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Susanna Feldmann
Susanna Maria Feldmann (
2 de noviembre de 2003 - 
22 de mayo de 2018) fue una joven judía de ciudadanía alemana de 14 años que fue violada y asesinada la noche del 22 de mayo de 2018 en Wiesbaden por Ali Bashar Ahmad Zebari, un solicitante de asilo de 21 años del Kurdistán iraquí.
Incidente
El 23 de mayo de 2018, a las 21 horas, la madre de Susanna Feldmann denunció su desaparición, después de que no volvió a casa como esperaba. Susanna envió un mensaje de texto a un amigo: “Ayúdame, quiero irme y no me dejan. Me tienen aquí”. La policía encontró sus restos a principios de junio enterrados cerca de la línea de ferrocarril de Ländches. Se descubrió que había sido violada y luego asfixiada esa noche.
La madre de Feldmann, Diana, había seguido recibiendo mensajes de WhatsApp del teléfono de su hija después de su muerte. Diana dijo que el crimen no fue visto como antisemita porque Susanna nunca mencionó su judaísmo, y su padre era turco y su madre originaria de Rusia, por lo que tenía banderas turcas y rusas en su perfil de Instagram. Susanna había conocido a varios inmigrantes en Wiesbaden y estaba enamorada del hermano menor de Ali, "KC", y Diana cree que KC la engañó para complacer a su hermano mayor y su pandilla. Diana Feldmann culpa a la cultura de acoger a los inmigrantes (Willkommenskultur) y pidió que Angela Merkel renuncie.
Responsable
Ali Bashar Ahmad Zebari nació el 11 de marzo de 1997. Usó su segundo nombre de pila como apellido cuando llegó a Alemania, por lo que los medios inicialmente informaron que su nombre era Ali B. o Ali Bashar. Según Stefan Müller, jefe de policía para el oeste de Hesse, Zebari probablemente había emigrado a Alemania en octubre de 2015 como parte de una ola de otros migrantes. Zebari vivía en una estación de refugiados en el distrito de Erbenheim de Wiesbaden y era conocido por las autoridades policiales por otros delitos que involucraban violencia. Su solicitud de asilo había sido rechazada en 2016, pero se le permitió permanecer en Alemania mientras se revisaba su apelación. También fue uno de los varios sospechosos de la agresión sexual a una niña de 11 años que vivía en el mismo refugio para refugiados.
Zebari, junto con sus padres y cinco hermanos, partió de Alemania el 2 de junio de 2018 utilizando nombres falsos. El 8 de junio de 2018, fue capturado en el norte de Irak por las autoridades kurdas. Según Tarik Ahmad, jefe de policía de Dohuk, donde fue arrestado el sospechoso, Zebari confesó haber estrangulado a Feldmann, pero negó haberla violado.
Dieter Romann, jefe de la fuerza policial federal de Alemania, viajó a Irak y devolvió al sospechoso a Alemania con la ayuda de las autoridades de la región del Kurdistán. El gobierno central iraquí presentó una protesta formal ante Alemania. En Alemania, Romann fue demandado por privar ilegalmente al sospechoso de su libertad, pero los procedimientos se detuvieron en enero de 2019 con el argumento de que las autoridades iraquíes habían iniciado la extradición. Con base en la información proporcionada por el gobierno iraquí, el fiscal Oliver Kuhn dijo que el sospechoso probablemente era mayor de lo que indican sus documentos alemanes. Die Welt informó que la discrepancia de edad surgió porque cuando el sospechoso y su familia solicitaron asilo en Alemania en 2015, afirmaron no tener documentos de identidad; luego presentaron documentos iraquíes en el consulado de Frankfurt. Debido a que Zebari tiene 21 años, mayor que los 20 informados originalmente, será juzgado como un adulto.
Secuelas y debate público
El Consejo Central de Judíos de Alemania confirmó que la víctima era miembro de la comunidad judía de Maguncia y expresó sus condolencias a los amigos y familiares de la víctima.
Este incidente fue uno de una serie de crímenes de alto perfil cometidos por solicitantes de asilo que llevaron a una tensa conversación política sobre la política migratoria alemana y endurecieron los sentimientos antiinmigratorios. Se planteó la cuestión de cómo se le había permitido a Zebari permanecer en Alemania después de que su solicitud de asilo fuera rechazada en 2016. Políticos como Christian Lindner (FDP) plantearon preguntas sobre cómo el sospechoso, junto con su familia, pudieron salir de Alemania utilizando identidades falsas. El Süddeutsche Zeitung señaló que el asesinato de Feldmann figuraba en las redes sociales entre los casos de otras mujeres alemanas asesinadas por solicitantes de asilo, y enumeró los asesinatos de Maria Ladenburger de Friburgo (2016), Mia Valentin de Kandel (2017) y Mireille B. de Flensburg (2018); Los medios de comunicación extranjeros como The New Yorker también agruparon los asesinatos de Mia Valentin y Daniel Hillig. Los partidos nacionalistas y las redes sociales también se han indignado y han difundido el caso para pedir justicia.
Veredicto y sentencia
El 10 de julio de 2019, el tribunal de Wiesbaden declaró culpable a Bashar de asesinato y violación y lo condenó a cadena perpetua. Según la legislación alemana, el condenado puede obtener la libertad condicional después de 15 años si el tribunal determina que ya no es peligroso. En este caso, el veredicto incluye una constatación de "gravedad excepcional de la culpa", lo que significa que la liberación después de 15 años es casi imposible.
