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Egregor
Egregor, también deletreado egregore; del francés égrégore, del griego antiguo ἑγρήγορο egrḗgoro; 'observador', 'vigilante', 'despierto') es un concepto ocultista que representa una entidad no física que surge de un grupo colectivo de personas.
Históricamente, el concepto se refería a seres angelicales u observadores, y los rituales y prácticas específicos asociados con ellos, es decir, dentro de las tradiciones enoquianas.
El concepto ha sido adoptado por diversas corrientes de magia moderna para referirse a una 'forma de pensamiento' (thoughtform), específicamente una manifestación o entidad psíquica autónoma; una "mente colectiva" que se crea cuando un grupo de personas se unen conscientemente para un propósito común.
Cuando un complejo de pensamientos, deseos e intenciones adquiere tal nivel de sofisticación que parece operar de manera autónoma desde la conciencia del mago, como si fuera un ser independiente, entonces dicho complejo se denomina servitor. Cuando un ser así se vuelve lo suficientemente grande como para existir independientemente de cualquier individuo, como una forma de "entidad colectiva" o "mente grupal", entonces se le llama egregor.
La relación simbiótica entre un egregor y su grupo se ha comparado con los conceptos recientes de la corporación (como persona jurídica o entidad legal) y el meme.
Historia
Manuscrit trouvé à Zaragoza, o El manuscrito encontrado en Zaragoza, escrito por el autor polaco Conde Jan Potocki (1761-1815) a principios del siglo XIX, presenta el término Egregores, refiriéndose a los "más ilustres de los ángeles caídos". Sin embargo, Es importante tomar nota de la fuerte inclinación orientalista y fantástica de la novela.
El segundo autor en adaptar egregore en una lengua moderna parece ser el poeta francés Victor Hugo, en La Légende des siècles ("La leyenda de las edades"), Primera Serie, 1859, donde utiliza la palabra "égrégore" primero como adjetivo, luego como sustantivo, dejando el significado oscuro. El autor parece haber necesitado una palabra que rimara con palabras que terminan en el sonido "o". No sería el único ejemplo de creación de palabras de Victor Hugo. Sin embargo, la palabra es la forma normal que tomaría la palabra griega ἑγρήγορο ('vigilante') en francés. Este fue el término usado en el Libro de Enoc para los grandes espíritus parecidos a ángeles.
Eliphas Lévi, en Le Grand Arcane ("El gran misterio", 1868) identifica a los "egregores" con la tradición relativa a los "Vigilantes", los padres de los nephilim, describiéndolos como "seres terribles" que "nos aplastan sin piedad porque desconocen nuestra existencia".
El concepto del egregore como forma de pensamiento grupal se desarrolló en obras de la Orden Hermética del Alba Dorada y los rosacruces y ha sido mencionado por escritores como Valentin Tomberg, en particular en su libro Meditaciones sobre el Tarot, escrito de forma anónima. También fue mencionado en el libro El maravilloso universo de la magia, del autor chileno Enrique Barrios.
Un concepto bien conocido de egregor es el GOTOS de Fraternitas Saturni.
Gaetan Delaforge, definió el término en su concepto moderno en la revista Gnosis en 1987.
El concepto apareció en la serie de artículos Corporate Metabolism de Paco Xander Nathan, que se publicaron en 2001.
La noción de "egregor" también aparece en Roza Mira de Daniil Andreyev, donde representa el espíritu brillante como una nube asociado con la Iglesia.
Egregore también se utiliza en relación con los surrealistas de Montreal, mejor conocidos como Les Automatistes, en Egregore: una historia del movimiento automatista de Montreal de Ray Ellenwood.
Gary Lachman identifica a Pepe the Frog como un egregor en su libro Dark Star Rising.
