Manuel Domecq García

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Manuel Tomás Domecq García (12 de junio de 1859, Tobatí, Paraguay - 11 de enero de 1951, Buenos Aires, Argentina) fue un marino argentino. Fundó la Liga Patriótica Argentina en 1919 para combatir a la subversión y fue Ministro de Marina de la Nación entre 1922 y 1929.

Infancia

Domecq García nació en Paraguay. Poco después de cumplir los 5 años estalló la Guerra de la Triple Alianza, en la cual fallecieron Tomás Domecq, su padre, en el Cerco de Humaitá, y Eugenia García, su madre, en la Batalla de Peribebuy. En 1869 le tocó presenciar la Batalla de Acosta Ñu, en la cual las tropas brasileñas no sólo superaban en proporción de 5 a 1 a las paraguayas, sino que además los hombre a las órdenes del Conde d'Eu se enfrentaron a un cuerpo de enemigos en el que tres cuartas partes eran niños soldados menores de 10 años.

Capturado por los brasileños -quienes habituaban llevar paraguayos a su país para venderlos como esclavos-, su tía Concepción Domecq pagó su rescate para que lo dejaran en libertad.

Concluido el conflicto bélico, Domecq García y su hermana fueron enviados a la Argentina para ser criados por su tío el estanciero Manuel García Ramos. Sin embargo, durante el traslado a Buenos Aires, una confusión hizo que el niño terminara con un oficial brasileño que lo entregó al Duque de Caixas. Tras cuatro meses de búsqueda, García Ramos consiguió que el militar brasileño le devolviese a su sobrino y pudiera así instalarse por fin en la Argentina.

Estudiante en la Escuela Naval

Domecq García estudió en el Seminario Anglo-Argentino, hasta que ingresó a la Escuela Naval que el presidente Domingo Faustino Sarmiento había creado sobre el buque General Brown. Sin embargo la misma fue clausurada en 1877 después de una sublevación de los cadetes. Tras una depuración en el plantel de estudiantes, se creó una nueva Escuela Naval que funcionó en la cañonera Uruguay, dirigida por Martín Guerrico.

En mayo de 1880 Domecq García formó parte de la escolta de honor que custodió los restos mortales de José de San Martín, repatriados ese año desde Francia. Al mes siguiente se vio obligado a sofocar a la rebelión de las milicias bonaerenses que se habían alzado contra el presidente Nicolás Avellaneda.

A fines de ese año egresó como guardiamarina, en una promoción en la que también estuvieron Félix Dufourq, Eugenio Leroux y José Durand.

Expedicionario

En 1881 se traslado al norte de la Patagonia Argentina para realizar tareas de balizamiento en Bahía Blanca. Allí le tocó en una ocasión hacer frente a un malón de indios que habían atacado a la población civil. Ese episodio quedó enmarcado como parte de las acciones de la Conquista del Desierto.

En 1883, acompañando a Hunter Davidson, viajó al territorio de la Selva Paranaense y del Gran Chaco en calidad de oficial hidrográfico para realizar un relevamiento de la zona. Durante el viaje bautizó con nombres de próceres argentinos a los diversos accidentes fluviales que encontró, pero ninguna de las denominaciones dadas por él pasó a ser de uso común.

Su trabajo fue ampliamente reconocido. Debido a ello en 1886 integró la comisión que dirimió las cuestiones de límites entre Argentina y Brasil.

Modernización de la Armada Argentina

Domecq García participó en 1882 de la creación del Centro Naval de la República Argentina junto a otros egresados de las primeras promociones de la Escuela Naval. Pronto se sumarían altos oficiales de la Armada Argentina y algunos civiles interesados en temas navales. El CNRA organizó tertulias donde se discutió acerca de la necesidad de modernizar la flota militar argentina. El problema de la Argentina era que las embarcaciones de guerra que poseía -dada su limitada capacidad de navegación- se concentraban en el área del río de la Plata, dejando desprotegido todo el litoral marítimo del país.

Durante una década presionaron al gobierno argentino para que adquiriese nuevos barcos, hasta que finalmente éste cedió, especulando que los necesitarían en caso de que estallase una guerra contra Chile.

Así, en 1896, a Domecq García se le asignó la tarea de supervisar la construcción de una fragata de última tecnología que debía funcionar como buque escuela. Debido a ello viajó a Inglaterra, donde la Presidente Sarmiento fue construida durante varios meses. Para dejar su impronta, Domecq García pidió que en el mascarón de proa que lleva esa embarcación estuviese tallado el rostro de su esposa.

Observador de la Guerra Ruso-Japonesa

En 1902 la Argentina firmó con Chile el Pacto de Mayo, destinado a garantizar la paz entre las dos naciones. Una de las condiciones acordadas fue equiparar las fuerzas navales, lo que obligó a la Argentina a deshacerse de algunas embarcaciones.

Domecq García viajó a Italia para supervisar la construcción de dos acorazados, los cuales fueron vendidos en 1904 a Japón. El marino arribó al país asiático poco antes de que estallara la guerra contra Rusia. Teniendo la posibilidad de atestiguar un conflicto bélico cuyo desarrollo ocurriría predominantemente en el mar, Domecq García solicitó quedarse en la isla como observador técnico.

Durante su estadía -que se prolongó hasta mediados de 1906- el marino hizo un estudio sociopolítico del Japón que entregó a sus superiores. Allí señaló que mientras Occidente subestimaba a los japoneses, éstos habían procurado modernizarse lo suficiente como para convertirse en una potencia regional, que podía llegar a imponer su hegemonía en esa parte del planeta.

Carrera armamentística naval sudamericana

Al retornar a la Argentina, Domecq García se encontró con que Brasil había decidido invertir grandes sumas de dinero para crear una poderosa flota de buques militares. La situación incomodó tanto a los argentinos como a los chilenos, quienes decidieron responder adquiriendo más barcos.

El presidente José Figueroa Alcorta le encomendó a Domecq García que hiciera un estudio en el extranjero para escoger los astilleros donde se construirían las nuevas embarcaciones de la Armada Argentina. Esa misión obligó al marino a viajar nuevamente por Europa, pero al final decidió que el mejor lugar para encargar y supervisar la construcción de los buques sería EEUU. A raíz de ello se trasladó a ese país en 1910 y retornó comandando los acorazados Moreno y Rivadavia, los cuales en ese momento eran dos de los buques más imponentes del mundo.

En 1911 se le presentó a la Argentina la posibilidad de crear una flota militar aérea. Domecq García integró la comisión que debía impulsar el proyecto, comisión en la que también estaban Gregorio Vélez, Juan Pablo Sáenz Valiente, Jorge Newbery y Antonio de Marchi entre otras personalidades ilustres de la época.

Domecq García fue asesor del gobierno argentino en la redacción del Tratado de Límites del Río Uruguay de 1916, el cual fue rechazado por los orientales gracias a la iniciativa de Luis Alberto de Herrera, que lo consideraba desventajoso para su país.

Liga Patriótica Argentina

En enero de 1919 se produjo en la Argentina una insurrección popular liderada por judíos anarquistas y comunistas (esa serie de eventos sería denominada "Semana Trágica"). Aterrados con la idea de que se produjera en tierras sudamericanas algo similar a lo que había ocurrido en Rusia en 1917, el gobierno movilizó sus tropas de defensa y seguridad para sofocar el movimiento. También permitió que civiles formasen unidades de autodefensa ante el peligro rojo.

Domecq García, en la sede del CNRA, convocó a un grupo de empresarios, sacerdotes católicos, profesionales liberales y otros ciudadanos para crear la Comisión Pro Defensa del Orden. Ésta se organizó rápidamente como una milicia que salió a las calles a asistir a las víctimas de los sediciosos y a reforzar la retaguardia de las fuerzas estatales del orden. Pocos días después de abortada la insurrección, se decidió que los hombres a las órdenes de Domecq García se convirtiesen en un cuerpo de protección regular: nacía así la Liga Patriótica Argentina.

Por presiones del gobierno, Domecq García se vio obligado a cederle el liderazgo de la organización al abogado Manuel Carlés, pero ello no significó el abandono del proyecto -con el cual siguió colaborando durante muchos años.

Ministerio de Marina

En 1922 el presidente Marcelo T. de Alvear lo designó Ministro de Marina, siendo junto a Ángel Gallardo y Vicente Gallo uno de los hombres de la Liga Patriótica Argentina en el gabinete de gobierno.

Durante su gestión presentó un anteproyecto para formar la Marina Mercante Argentina, el cual no se materializaría hasta muchos años después.

También consiguió que el Congreso de la Nación aprobase una ley para reforzar la flota de la Armada Argentina, incorporando submarinos equipados con torpedos.

Antes de abandonar su cargo ministerial, Domecq García pasó a retiro por haber alcanzado el límite de edad permitido para un oficial en servicio, ostentando el rango de Almirante.

Últimos años

Pese a haber servido con fidelidad a la Argentina y a haber recibido condecoraciones de diversos países del mundo a causa de ello, Domecq García nunca perdió sus vínculos con Paraguay. Por ese motivo, la Guerra del Chaco que enfrentó a la nación guaraní contra los bolivianos lo movilizó, iniciando una campaña para que la Argentina apoye al país que lo vio nacer. Por otro lado constituyó la Asociación Fraternal Pro Cruz Roja Paraguaya que se encargó de enviar medicamentos, abrigos y alimentos a los soldados del Paraguay que combatían en un terreno tan hostil.

En 1935 acompañó a Carlos Saavedra Lamas en su exitosa cruzada para lograr la paz entre las naciones beligerantes.

Con su bien ganada fama de hombre eficaz e íntegro, Domecq García siguió colaborando con los diferentes gobiernos argentinos en distintas tareas en las que se lo convocase: de ese modo encabezó la Comisión Nacional del Monumento al Teniente General Roca que tuvo por objetivo honrar la memoria de Julio Argentino Roca, fue interventor de la Sociedad Militar Seguro de Vida con el fin de sanear sus cuentas y normalizar a la mutual, y participó como funcionario de la Corporación de Transportes de la Ciudad de Buenos Aires creada para mejorar el sistema de transporte público de la capital nacional.

Si bien aprobó a la Revolución del 43 (del mismo modo en que había simpatizado con la Revolución del 30), en septiembre de 1945 publicó junto a los almirantes retirados Carlos Daireaux, Ismael Galíndez y Enrique G. Fliess una solicitada en el diario La Nación en la que repudiaba la candidatura de presidencial de Juan Perón como continuidad del régimen.

Domecq García apadrinó y promovió al movimiento escultista argentino.

Ataques contra su memoria

La actuación pública de Domecq García despertó en muchos de argentinos la admiraación por su figura, lo que se tradujo en la realización de varios homenajes que terminaron con el bautismo con su nombre a buques, astilleros y otros sitios y artefactos. Sin embargo en 2008 un sector progresista del peronismo encabezado por Nilda Garré decidió rebautizar todo lo que llevase por nombre "Almirante Manuel Domecq García" con la denominación "Almirante Segundo Storni", aduciendo que su pertenencia a la Liga Patriótica Argentina debía ser repudiada.

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