Shinzō Abe

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Shinzō Abe

Shinzō Abe Kishi (21 de septiembre de 1954, Shinjuku, Japón - 8 de julio de 2022, Kashihara, Japón) fue un político japonés de ideología nacionalconservadora, que ocupó el cargo de Primer Ministro en su país entre 2006 y 2007, y nuevamente entre 2012 y 2020. Murió asesinado en 2022.

Biografía

Abe nació en el seno de una familia vinculada a la política, ya que su padre Shintaro Abe fue Ministro de Relaciones Exteriores de Japón entre 1982 y 1986, y sus abuelos Kan Abe y Nobusuke Kishi se destacaron como líderes políticos en su época.

Se formó como politólogo en la Universidad de Seikei y en la Universidad de California del Sur. En 1979 fue contratado por la empresa Kobe Steel, pero tres años después dejó su puesto para trabajar en el sector público como funcionario en el Ministerios de Relaciones Exteriores.

Shinzō Abe (a la derecha) se reune con Robert Zoellick en enero de 2006.
En 1993 ingresó al Parlamento de Japón como representante del Partido Liberal Democrático de la Prefectura de Yamaguchi. Durante los gobiernos de Yoshirō Mori (2000-2001) y Junichiro Koizumi (2001-2006) se desempeñó como Secretario de Gobierno. Cobró notoriedad por su posición hostil frente a Corea del Norte, siendo el encargado de negociar la Declaración de Pyongyang de 2002, mediante la cual los comunistas admitieron haber secuestrado y esclavizado a decenas de japoneses durante la década de 1970.[1] Asimismo también le dieron fama sus posiciones conservadoras en relación a los programas nacionales de educación sexual.[2] Aunque lo que hizo destacar a Abe en la esfera pública de su país en primer lugar fue su posición dentro de la Sociedad Japonesa para la Reforma de los Libros de Texto de Historia, organización no gubernamental creada para desestigmatizar la imagen del Imperio del Japón durante la Segunda Guerra Mundial, rechazando la visión de que los funcionarios gubernamentales de aquella época que condujeron las acciones bélicas hubiesen sido autores de crímenes de lesa humanidad (de hecho Abe publicó el libro revisionista Hacia una nación hermosa en 2006 en el cual sintetiza su perspectiva).

En septiembre de 2006 se convirtió en líder del PLD y en Primer Ministro de Japón. Debido a que en el momento de su asunción tenía 52 años, pasó a ser de esa manera el político más joven hasta ese momento en acceder al cargo de mayor relevancia política de su país.

Primer mandato como Primer Ministro

Política interior

Dado su conservadurismo, Abe apoyó a la Familia Imperial negándose a reformar las leyes para permitir modificaciones en sus tradiciones.

En materia económica impulsó una serie de reformas fiscales, promoviendo el recorte del gasto estatal para equilibrar las finanzas nacionales y reducir el déficit anual.

Política exterior

Abe se manifestó hostil hacia Corea del Norte, sugiriendo incluso que el país debía ser sancionado por la comunidad internacional a causa de la fabricación y testeo de misiles sobre el Mar del Japón.

Con China y Corea del Sur, en cambio, Abe planteó establecer una mayor apertura e integración, aunque su visita al Santuario Yasukuni (un santuario que honra a los combatientes de las guerras japonesas) causó malestar en ambos países. En tanto que frente a India y Taiwán buscó establecer una alianza estratégica para crear una esfera de influencia en la región, lo que llevó a los chinos a suponer que el plan real era crear una suerte de alianza militar similar a la OTAN (hipótesis que se fortaleció cuando Abe aseguró que debía revisarse la legislación que impide a Japón tener fuerzas armadas con gran capacidad bélica).

Al igual que todos sus antecesores desde 1945, Abe mantuvo una relación muy estrecha con los Estados Unidos, pero la misma se vio opacada por sus posiciones revisionistas cuando, en marzo de 2007, aseguró que no se retractaba de su afirmación de que los japoneses no esclavizaron sexualmente a mujeres chinas y coreanas en la década de 1940 y que no emitiría una nueva disculpa oficial por ese hecho, sosteniendo que la de 1992 resultaba suficiente.

Periodo intermedio

Su primer mandato como Primer Ministro duró solamente un año, viéndose forzado a renunciar por la progresiva disminución del apoyo popular.

Durante los años siguientes continuó desempeñándose como parlamentario. Cuando China superó oficialmente a Japón como la nación económicamente más poderosa de Asia, Abe comenzó una campaña contra la expansión de la influencia de sus vecinos que incluyó visitas a Taiwán y el apadrinamiento en los Estados Unidos por parte del Instituto Hudson.

Segundo mandato como Primer Ministro

Política interior

Abe asumió su segundo mandato como Primer Ministro en medio de una crisis económica. Para subsanarla, estableció un plan basado en tres estrategias (a las que llamó "flechas"): expansión cuantitativa para aumentar la oferta de dinero, estímulo fiscal a través del gasto público y ajuste estructural. El plan produjo una combinación de reflación y gasto público que sirvió para sacar a la economía japonesa del estancamiento que padecía desde hacía más de una década. En Occidente se apodó a la política económica del Primer Ministro como "abeconomía".

A diferencia de su periodo anterior en el poder, en esta ocasión Abe evitó promover el revisionismo histórico puesto que ello había contribuido a la pérdida de su imagen positiva.

Determinado a mejorar su imagen internacional, apoyó el Top Global University Project, una iniciativa pensada para aumentar el intercambio internacional de estudiantes y académicos con la esperanza de que las élites de todo el mundo sean positivamente impresionados por la cultura y la sociedad japonesa. Al mismo tiempo Abe se mostró totalmente reacio a modificar las leyes de inmigración y de recepción de refugiados en territorio nacional, y estableció un programa para aumentar el número de matrimonios en el país, intentando con ello estimular el incremento de la tasa de natalidad.

En 2019 el gobierno autorizó la caza comercial de ballenas, algo que había prohibido en 1988 por la mala imagen que generaba ello ante la comunidad internacional.

Su acto más cuestionable fue el Escándalo Moritomo Gakuen de 2017: Moritomo Gakuen, una escuela privada que impulsaba una educación abiertamente nacionalista y de la que su esposa era madrina, había adquirido de manera irregular una importante cantidad de terrenos públicos para mejorar sus instalaciones, lo que fue fuertemente criticado por los japoneses.

Política exterior

Aunque su hostilidad hacia Corea del Norte se mantuvo durante todo este periodo, Abe se centró en mejorar las relaciones con Corea del Sur. En 2013 una nueva visita al Santuario Yasukuni había causado malestar entre los surcoreanos, el cual se aplacó cuando en 2015 el Primer Ministro admitió -en contra de lo que había sostenido siempre- que los japoneses si esclavizaron sexualmente a mujeres coreanas durante la década de 1940, y se comprometió a indemnizar a las sobrevivientes. Sin embargo tres años más tarde volvieron a surgir problemas entre ambos países cuando los surcoreanos se negaron a eliminar las estatuas que conmemoran a las mujeres de solaz y además les exigieron a algunas empresas japonesas asistir a las familias de personas que fueron forzadas a trabajar para ellas durante la Segunda Guerra Mundial.

Abe retomó la idea de profundizar los vínculos con India y Taiwán, pero, con una mirada más global, también buscó fortalecer las relaciones con la Unión Europea y con países de Hispanoamérica, lo que lo llevó a viajar extensamente por el mundo. Incluso la oferta de organizar los Juegos Olímpicos de Verano en Tokio en 2020 estuvo relacionado a esa estrategia de expansión internacional. Asimismo intentó impactar en Medio Oriente, lo que derivó en que en 2015 el Estado Islámico secuestrase a dos japoneses y pidiera un rescate millonario al gobierno japonés, asesinando luego a ambas personas ante la negativa de Abe de ceder ante el terrorismo (algo que multiplicó las críticas hacia su persona en su país).

Con Estados Unidos el vínculo fue el habitual de cooperación, más allá de que en 2013 decretó que en Japón debía celebrarse cada 28 de abril el Día de la Restauración de la Soberanía Nacional en conmemoración a la finalización de la ocupación de los Estados Unidos a la isla. Sin embargo cuando en 2017 asumió la presidencia Donald Trump, Abe se sintió impulsado a realizar un pacto de mayor integración e intercambio económico entre ambos países.

Por otro lado la política de recuperación de las fuerzas armadas (contrariando la tradición pacifista japonesa instalada en 1945) fue mal recibida por un sector de la población del país, sosteniendo que además ello implicaba una modificación profunda del manejo de los secretos de Estado y de las actividades de contraespionaje.

Asesinato

Abe renunció a su cargo de Primer Ministro en septiembre de 2020, afirmando que padecía de una colitis ulcerosa que estaba afectando severamente su salud.

Dos años después, el 8 de julio de 2022, fue asesinado en la localidad de Kashihara, mientras se encontraba de visita allí para manifestarle su apoyo a un candidato local del PLD. Su atacante fue Tetsuya Yamagami, un hombre que lo agredió con un arma de fuego de fabricación casera. Aparentemente el motivo que tuvo para ello fue para protestar por los vínculos que el político mantenía con la Iglesia de la Unificación -la apodada "Secta Moon"-, la cual habría afectado la vida familiar de Yamagami. Dado lo extraño del evento y lo rara de la excusa, se cree que Abe fue asesinado por algún otro motivo.

Referencias

  1. The Abe Enigma Time Magazine, en inglés
  2. Kodomo wa shakai no takara, kuni no takara desu Página del LDP sobre la educación sexual, en japonés

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