Guillermo I de Alemania

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Guillermo I de Alemania

Guillermo I de Alemania y Prusia (en alemán: Wilhelm Friedrich Ludwig); nació en Berlín el 22 de marzo de 1797 y falleció en esa misma ciudad el 9 de marzo de 1888. Miembro de la prestigiosa Casa de Hohenzollern, fue Rey de Prusia desde el 2 de enero de 1861 hasta su muerte (la cual tuvo lugar el día 9 de marzo de 1888) y primer Káiser (Emperador) del Imperio alemán desde el 18 de enero de 1871 hasta su muerte. Además, Guillermo I fue el primer Jefe de Estado de una Alemania unida. Bajo la dirección de Guillermo y de su Primer Ministro Otto von Bismarck, Prusia logró la unificación de Alemania y la creación del Imperio alemán.

Un joven príncipe prusiano

El futuro Rey y Emperador Guillermo Federico Luis de Prusia (en alemán: Wilhelm Friedrich Ludwig von Preußen) nació en el Kronprinzenpalais (en Berlín), el 22 de marzo de 1797, siendo el segundo hijo del Rey Federico Guillermo III de Prusia y de Luisa de Mecklemburgo-Strelitz. Su abuelo, el Rey de Prusia Federico Guillermo II murió en el mismo año de nacimiento de Guillermo, a los 53 años, el 16 de noviembre de 1797, y entonces el padre de Guillermo ascendió al trono prusiano con el nombre de Federico Guillermo III.

Dado que no se esperaba que Guillermo ascendiera al trono, recibió poca educación. Sirvió en el Ejército desde 1814 en adelante, luchó contra Napoleón I durante las Guerras Napoleónicas y demostró ser un valiente soldado (de hecho recibió la Cruz de Hierro). En 1815, Guillermo luchó en las batallas de Ligny y Waterloo, bajo las órdenes del Mariscal de Campo Gebhard Leberecht von Blücher. La guerra y la lucha contra Francia dejaron una impresión permanente en él, causando una antipatía de larga data contra los franceses.

También se convirtió en un diplomático excelente en las misiones después de 1815.

En 1829, Guillermo se casó con la princesa Augusta de Sajonia-Weimar-Eisenach. Augusta era la hija del Gran Duque Karl Friedrich von Sachsen-Weimar-Eisenach. Su matrimonio fue estable hacia el exterior, pero no fue muy feliz. Guillermo y la princesa Augusta tuvieron dos hijos:

El 7 de junio de 1840 falleció el Rey Federico Guillermo III por lo que el hermano mayor de Guillermo (el Príncipe Federico Guillermo) se convirtió en el Rey de Prusia con el nombre de Federico Guillermo IV. Puesto que no tenía hijos, Guillermo fue el primero en la lista para sucederle en el trono y por lo tanto se le dio el título Prinz von Preußen (Príncipe de Prusia).

Durante las revoluciones de 1848, el Príncipe Guillermo aplastó con éxito una revuelta en Berlín dirigida contra el Rey Federico Guillermo IV. Luego ayudó a sofocar un levantamiento en Baden, donde comandó al Ejército prusiano. En octubre de 1849, se convirtió en gobernador general de Renania y Westfalia.

En 1854, el príncipe fue elevado al rango de Mariscal de Campo y nombrado gobernador de la fortaleza federal de Maguncia. En 1857, su hermano el Rey Federico Guillermo IV sufrió un derrame cerebral y quedó incapacitado mentalmente para el resto de su vida. En enero de 1858, Guillermo se convirtió en príncipe regente de Prusia por su hermano.

Guillermo Rey de Prusia (1861-1871)

Nombramiento de Bismarck como Primer Ministro de Prusia

Al fallecer el Rey Federico Guillermo IV sin hijos varones, el 2 de enero de 1861, el príncipe regente Guillermo accedió al trono de Prusia con el nombre de Guillermo I de Prusia, heredando un conflicto entre su fallecido hermano Federico Guillermo y el parlamento liberal. Antes de la regencia no había intervenido en política, por lo que se le consideraba una persona políticamente neutral.

En 1862 el Parlamento se negó a aumentar el presupuesto militar. Cuando su petición, respaldada por su ministro de Guerra Albrecht von Roon, fue negada, Guillermo consideró por primera vez renunciar. No obstante, siguiendo el consejo de Roon, designó como Primer Ministro a Otto von Bismarck (1862). De acuerdo con la Constitución prusiana, el Primer Ministro era responsable únicamente ante el Rey, no el Parlamento. No obstante, fue Bismarck quien efectivamente dirigió la política, tanto nacional como extranjera; en varias ocasiones obtuvo el dictamen favorable de Guillermo amenazando con renunciar. De esta forma, el Rey Guillermo se mostró favorable a una política conservadora.

Las Guerras de Unificación

Guerra de los Ducados

Artículo principal: Guerra de los Ducados

Ante el intento del monarca danés Cristián IX de anexionarse los territorios germanos de Schleswig y Holstein, en 1864 estalló la llamada Guerra de los Ducados entre el Reino de Prusia y el Imperio austriaco por un lado, y el Reino de Dinamarca por el otro. Las dos naciones conjuntamente vencieron a Dinamarca, que solicitó un armisticio a finales de julio, iniciando las conversaciones preliminares de paz en agosto plasmadas en la Paz de Viena, firmada el 30 de octubre de 1864.

El tratado acordó la adquisición en condominio de los ducados de Schleswig-Holstein por los vencedores y la compensación económica por la adquisición de Lauenberg. Pese a todo, este tratado sirvió solo para poner fin a la guerra por lo que hizo falta un nuevo acuerdo entre las potencias vencedoras para aclarar el reparto de los ducados. De esta forma, el 14 de agosto de 1865, Prusia y Austria firmaron la Convención de Gastein, mediante la cual Prusia y Austria se hicieron cargo de la administración respectiva de Schleswig y Holstein.

Guerra Austro-Prusiana

Artículo principal: Guerra Austro-Prusiana

Ni Prusia ni Austria quedaron satisfechas con lo dispuesto en la Convención de Gastein. Luego de asegurarse la neutralidad de Francia y del Imperio ruso, Bismarck procedió a atacar a los austriacos. Luego de una aplastante victoria prusiana en una corta guerra que duró sólo siete semanas (de ahí que a la guerra también se la conozca como Guerra de las Siete Semanas) finalmente se firmó la paz entre ambas partes. El 23 de agosto de 1866, con la Paz de Praga oficialmente quedó disuelta la Confederación Germánica (la cual hasta entonces aglutinaba a todos los Estados alemanes y a Austria). Prusia se anexó Hannover y Hesse-Kassel; Austria cedió Holstein a Prusia, pagó indemnización de guerra y entregó el Véneto al Reino de Italia (aliado de los prusianos en la guerra). Además, Prusia constituyó la Confederación Alemana del Norte. De esta forma, Prusia se convirtió en la potencia hegemónica en Alemania y pudo establecer la unión de los Estados alemanes situados al norte del río Meno, constituida en 1867. Esta alianza reemplazó a la Confederación Germánica. Fueron 22 los Estados alemanes que se incorporaron a la Confederación Alemana del Norte. El poder legislativo quedó repartido en dos asambleas: el Reichstag (parlamento) y el Bundesrat (Consejo Federal). La Confederación estableció alianzas con Baviera, Wurtemberg y el gran ducado de Baden, que se comprometieron a poner sus tropas bajo el mando del Rey de Prusia (Guillermo I) si un tercer Estado atacara a algún miembro de la Confederación. La Dieta fue elegida mediante sufragio universal, la nueva Constitución entró en vigor el 1 de julio de 1867 y Bismarck se convirtió en canciller de la nueva Confederación. La Constitución contemplaba que cada Estado sería autónomo en materia de finanzas, justicia, culto y enseñanza. A la Confederación incumbían ejército, marina, política exterior, legislación comercial, aduanas, moneda, legislación civil y correos. El poder ejecutivo estaba en la presidencia desempeñada por el Rey de Prusia (con carácter hereditario), que era el responsable de la política exterior, comandante supremo del ejército y que ejercía el poder a través del canciller, que sólo respondía ante él. Así, Guillermo I pasaba a desempeñar el papel de presidente de la Confederación Alemana del Norte (además de ser el Rey de Prusia) y el camino hacia la Unificación alemana se acercaba.

Guerra Franco-Prusiana

Artículo principal: Guerra Franco-Prusiana

Para lograr la Unificación tan ansiada se necesitaba la unión de todos los Estados alemanes, incluidos los del sur. Para eso era necesario una guerra contra un histórico enemigo externo: Francia. Francia siempre hizo todo lo que tuvo a su alcance para que Alemania no se unifique, porque (para Francia) era mejor enfrentarse a muchos Estados alemanes dispersos y débiles que a uno unificado y poderoso. Lo hizo con el cardenal Richelieu en la Guerra de los Treinta Años (Paz de Westfalia), luego Talleyrand en el Congreso de Viena (con la ayuda del Reino Unido y de Austria) y ahora pretendía hacerlo el Emperador Napoleón III. Bismarck, entretanto, pretendía hacer estallar la guerra y entonces decidió enviar el siguiente telegrama:

"Después de que los informes acerca de la renuncia del príncipe heredero de Hohenzollern fueran oficialmente transmitidos por el Gobierno Real de España al Gobierno Imperial de Francia, el embajador francés presentó ante Su Majestad el Rey, en Ems, la exigencia de autorizarle a telegrafiar a París que Su Majestad el Rey habría de comprometerse a abstenerse de dar su aprobación para que la candidatura de los Hohenzollern se renueve.

Su Majestad el Rey, por lo tanto, rechazó recibir de nuevo al enviado francés y le informó a través de su ayudante que Su Majestad no tenía nada más que decir al embajador".

La trampa de Bismarck funcionó: el 19 de julio de 1870 Napoleón III le declaró la guerra a Prusia.

La guerra fue desastrosa para los franceses. Si bien ambos ejércitos eran similares, los Estados alemanes estaban mejor preparados para el combate. El 1 de septiembre de 1870, los franceses sufrieron una aplastante derrota en la batalla de Sedán y al día siguiente, el propio Napoleón III fue capturado por los prusianos.

La guerra contra Francia había logrado los efectos que Bismarck quería: los Estados alemanes del sur se unieron a Prusia.

Káiser

Proclamación como Emperador Alemán

El 18 de enero de 1871, Guillermo fue proclamado Emperador Alemán en el Galería de los Espejos del Palacio de Versalles. Este título fue elegido cuidadosamente por Bismarck después de la discusión hasta (y después) el día de la proclamación. Guillermo aceptó de mala gana este título pues él hubiera preferido "Emperador de Alemania", el cual, sin embargo, era inaceptable para los monarcas federados y también hubiera manifestado una reivindicación a tierras fuera de su reino (Austria, Suiza, Luxemburgo, etc.) El título de "Emperador de los Alemanes", como se propuso en 1848, fue descartado ya que se consideraba elegido "por la gracia de Dios", no por el pueblo como en una república democrática.

La Confederación Alemana del Norte se transformó en el Imperio alemán ("Kaiserreich"). Se fundó un único Estado de carácter federal con el Rey de Prusia como jefe de Estado, con el título imperial y "presidente" o primus inter pares de los monarcas que se federaron de los reinos de Baviera, Wurtemberg, Sajonia, el Gran Ducado de Baden y el de Hesse. También quedaron incorporadas las ciudades libres de Hamburgo, Lübeck y Bremen.

Intentos de asesinato y muerte

El 11 de mayo de 1878, un plomero llamado Emil Max Hodel fracasó en un intento de asesinato a Guillermo en Berlín. Hodel utilizó un revólver para disparar al Káiser, mientras que el monarca y su hija, la princesa Luisa de Prusia, desfilaban en su carruaje. Cuando la bala se perdió, Hodel corrió por la calle y disparó otra ronda que también se perdió. En la conmoción una de las personas que trató de detener a Hodel sufrió graves lesiones internas y murió dos días después. Finalmente, Hodel fue decapitado el 16 de agosto de 1878.

Un segundo intento de asesinar a Guillermo I ocurrió el 2 de junio de 1878 por Karl Nobiling. Como el monarca pasó por delante en un coche abierto, el asesino disparó con una escopeta al Káiser desde la ventana de una casa del bulevar "Unter den Linden". Guillermo fue herido y trasladado de nuevo al palacio y Nobiling se disparó en un intento de suicidio. Mientras Guillermo sobrevivió a este ataque, el asesino murió de sus heridas auto-infligidas tres meses después.

Los intentos de asesinato contra el Káiser desembocaron en la promulgación de Leyes Antisocialistas por el Canciller Bismarck, debido a que los asesinos habían tenido relación con el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) y -el Partido- era visto como una amenaza contra el Estado y contra la integridad del Káiser.

Otro intento de asesinato contra el Káiser fracasó el 18 de septiembre de 1883, cuando un grupo de anarquistas había preparado un ataque con dinamita que fracasó debido al clima húmedo.

A pesar de los intentos de asesinato, el Káiser y su esposa eran muy populares, especialmente en sus últimos años. Muchas personas consideraban que el Káiser era la personificación de "la vieja Prusia" y además era bien visto su estilo de vida austero y sencillo.

El Káiser Guillermo falleció el 9 de marzo de 1888 en Berlín después de una corta enfermedad. Fue enterrado el 16 de marzo en el Palacio de Charlottenburg. Al finalizar su reinado, Alemania era uno de los países más poderosos del mundo.

Su sucesor en el trono fue su hijo Federico III, quien sólo reinó durante 99 días debido al cáncer. A su vez, a Federico lo sucedió su hijo Guillermo II, quien sentía mucha admiración por su abuelo.

Títulos y tratamientos

  • 1797-1861: Su Alteza Real el príncipe Guillermo de Prusia
  • 1861-1871: Su Majestad el rey de Prusia
  • 1871-1888: Su Majestad Imperial y Real el emperador de Alemania, rey de Prusia

Títulos completos

Su Majestad Imperial y Real Guillermo I, por la gracia de Dios, emperador de Alemania y rey de Prusia, margrave de Brandeburgo, burgrave de Núremberg, conde de Hohenzollern, duque soberano y supremo de Silesia y del Condado de Glatz; gran duque del Bajo Rin y de Posen, duque de Sajonia, de Westfalia, de Angria, de Pomerania, Lüneburg, Holstein y Schleswig, de Magdeburgo, de Bremen, de Güeldres, Cléveris, de Jülich y Berg; duque de los Wendos y los Casubios, de Crossen, Lauenburgo y Mecklemburgo; landgrave de Hesse y Turingia, margrave de la Alta y Baja Lusacia; príncipe de Orange, príncipe de Rügen, de Frisia Oriental, de Paderborn y Pyrmont, de Halberstadt, Munster, Minden, Osnabrück, Hildesheim, de Verden, Cammin, Fulda, Nassau y Moer; conde principesco de Henneberg, conde de la Marck, de Ravensberg, de Hohenstein, Tecklenburgo y Lingen, de Mansfeld, Sigmaringen y Veringen; señor de Frankfurt.

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