William MacAskill

De Metapedia
Saltar a: navegación, buscar
William David MacAskill (24 de marzo de 1987, Glasgow, Escocia) es un filósofo escocés. Especializado en el estudio de la ética, sus ideas han servido para brindarle justificación teórica a las acciones de líderes globalistas como Bill Gates.

Biografía

Nacido como William Crouch, fue educado en la Universidad de Cambridge y en la Universidad de Oxford, donde, una vez graduado, trabajó como docente e investigador. Cambió su apellido a "MacAskill" luego de contraer matrimonio y adoptar el apellido de soltera de la abuela materna de su esposa, en un deliberado gesto para acabar con la "tradición patriarcal".[1]

Ha publicado artículos en revistas académicas como Ethics, Mind, y The Journal of Philosophy, pero es más reconocido por sus textos difundidos a través de diarios progresistas como The New York Times, The Independent, The Guardian y The Washington Post.

Es fundador de las organizaciones 80,000 Hours y Giving What We Can, la primera dedicada a brindar orientación vocacional a jóvenes estudiantes y la segunda creada para reunir a profesionales dispuestos a donarle el 10% de sus ingresos a causas benéficas. Asimismo es presidente del Centre for Effective Altruism y director de la Forethought Foundation for Global Priorities Research, dos think tanks cuyo propósito es explicarle a la sociedad por qué consideran necesario impulsar una nueva ética mundial que sea adoptada por todos. Sam Bankman-Fried trabajó brevemente para el CEA antes de iniciar lo que sería la megaestafa de FTX.

MacAskill ha sido asesor de Jaan Tallinn, Gordon Brown y Bill Gates.

Pensamiento

El pensamiento ético de MacAskill está influenciado por el de Peter Singer.

Su principal teoría es la del altruismo efectivo: partiendo de la base de que mucha gente se ocupa de realizar buenas acciones para ayudar a los demás, a MacAskill le incomoda que todo ese esfuerzo derive en pequeños y efímeros gestos que alivian casos muy puntuales; en consecuencia propone que la gente apoye masivamente a la ciencia para que ésta provea de soluciones que impacten en un gran número de personas y que perduren durante muchos años en el tiempo. El ejemplo que usa para ilustrar su tesis es el de Viktor Zhdanov, un virólogo y epidemiólogo soviético que a fines de la década de 1950 motorizó la campaña de la Organización Mundial de la Salud para erradicar la viruela.

El filósofo también sostiene que boicotear a las fábricas del Tercer Mundo en las que se explota a los trabajadores sólo sirve para generar desempleo y empeorar las condiciones de vida de la población. En lugar de ello, propone que la gente en los países centrales escoja carreras altamente lucrativas (en el sector bancario, en el sector tecnológico, etc.) y done una parte de sus ganancias a los países periféricos, para ayudar así a mantener a los carenciados. Es decir, MacAskill no propone reducir el consumo de bienes y servicios en los países ricos, sino mantenerlo en alto grado pero compensándolo con una caridad generalizada hacia los países pobres.

En su obra advierte sobre una posible extinción de la especie humana o al menos sobre un colapso civilizacional provocado por diversos factores, por lo que exhorta a evitar alcanzar esa instancia. Para ello argumenta que deben escogerse y difundirse globalmente los valores adecuados, para que, llegado el momento de la crisis, la humanidad coopere entre si con el fin de consensuar una solución que sea incluyente y no excluyente. MacAskill señala que la tecnología ayuda a imponer valores, por lo que pronostica que quien desarrolle la inteligencia artificial tendrá la posibilidad de marcar el rumbo del mundo por varias generaciones.

Referencias

  1. MacAskill, William (2013-03-05). «Men Should Consider Changing Their Last Names When They Get Married». The Atlantic.

Bibliografía

  • Doing Good Better: Effective Altruism and a Radical Way to Make a Difference. Londres: Guardian Faber, 2015.
  • What We Owe the Future. Nueva York: Basic Books, 2022.

Artículos relacionados