Bastardos de Renania
Bastardos de Renania (en alemán: Rheinlandbastard) es como se conocían durante la época de la Alemania nacionalsocialista a los hijos mestizos, generalmente producto de la violación de mujeres alemanas por tropas negras coloniales introducidas por Francia y Reino Unido en suelo alemán, después de la Primera Guerra Mundial.
Según el Tratado de Versalles de 1919, la región de Renania (que limita con Francia, Bélgica y los Países Bajos) debía ser desmilitarizada y no se podrían estacionar tropas alemanas en ella. Sin embargo, en 1936, Hitler ordenó a las tropas alemanas reocupar la región para proteger a la población. Esta acción desató la ira y condena de las potencias ocupantes: Gran Bretaña y Francia. Pero ninguna nación intervino para imponer el tratado.
Con el objeto de poner freno al mestizaje promovido por sus enemigos, los nazis condujeron una campaña de esterilización. No obstante, no hubo leyes formales contra los negros y mestizos, como ocurría por ejemplo en los Estados Unidos. Los nacionalsocialistas estaban en contra de la mezcla racial y cultural de Europa, y tomaron medidas contra las manifestaciones de la cultura negra en la sociedad alemana; así, por ejemplo, se prohibió y persiguió la ejecución de música estilo jazz. Estos mestizos no tenían adonde ir, ya que Francia, que era directa responsable del comportamiento de los africanos que sirvieron en su ejército, no acogió a los descendientes[1].
Sumario
Primera Guerra Mundial
Durante la Primera Guerra Mundial, Alemania formó, junto con el Imperio Austro-Húngaro y el Reino de Italia, la denominada Triple Entente, que combatía a la Triple Alianza formada por Francia, Reino Unido y Rusia. Italia antes del final de la guerra cambiaría de bando y Rusia, tras la revolución bolchevique de 1917, abandonó la guerra.
Tropas negras coloniales
Durante el conflicto, como medida para intensificar los esfuerzos bélicos, Francia reclutó obligatoriamente a hombres de las colonias que tenía en África para servir como soldados auxiliares en el teatro de guerra en Europa. Estas tropas compuestas por nativos africanos, fueron usadas como carne de cañón ubicándolas en posiciones de primera línea, quedando expuestas a fuertes ataques de artillería y al uso de armas químicas por parte del ejército alemán. Esto hizo que la tasa de mortalidad fuera extremadamente alta.
Mestizaje
Con el fin de la guerra y la rendición alemana, estas tropas africanas quedaron estacionadas en Renania, sin poder regresar a sus comunidades de origen. Allí comenzaron a interactuar con la comunidad alemana local, cometiendo violaciones y aprovechándose de las mujeres alemanas que quedaron viudas y en situación de calle debido a las penurias económicas impuestas a Alemania por los vencedores de la guerra.
El término “bastardo de Renania” se debe a que muchas de estas mujeres indigentes comenzaron a parir mestizos bastardos que no eran considerados alemanes. Estos niños tampoco podían regresar a Francia porque, según la visión franco-colonial, los negros no podían ser colocados al mismo nivel de ciudadanía que los blancos[1].
Situación de los negros en Alemania
Durante el período de entreguerras en el país vivían dos grupos: los alemanes negros provenientes de las colonias alemanas en África y el grupo de bastardos del Rin, introducido a la fuerza por los enemigos de Alemania. El primer grupo, estaba mejor asimilado y no era considerado una gran amenaza para el pueblo alemán. Sin embargo, el grupo de mestizos bastardos fue perseguido. Para ambos casos, la propaganda nazi sostenía que casarse con negros significaba traicionar su propia raza.