Buenaventura Caviglia Cámpora

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Buenaventura Alberto Caviglia Cámpora (11 de noviembre de 1917, Montevideo, Uruguay - 20 de octubre de 2007, Montevideo, Uruguay) fue un abogado, militar, diplomático y escritor uruguayo que se destacó por su lucha contra el comunismo.

Biografía

Caviglia Cámpora era hijo de un renombrado filólogo e historiador uruguayo.

Se formó como abogado en la Universidad de la República. Durante sus años de estudiante militó en los grupos juveniles de la Acción Católica Uruguaya que daban el combate cultural contra las sectas liberales y socialistas -todas ellas agnósticas o ateas- que dominaban en la universidad. Ante ese escenario fue uno de los creadores de la revista Por la Patria, una publicación decididamente nacionalista.

Movido por el sentimiento uruguayista, en 1940 se incorporó al Ejército Nacional en calidad de reservista. Recibió preparación militar en el Centro General de Instrucción para Oficiales de Reserva, lo que lo habilitó a ascender en la jerarquía castrense -llegaría a ostentar el rango de Teniente Coronel a fines de la década de 1960.

Aunque su familia estaba vinculada al Partido Colorado, él se afilió al Partido Blanco, integrándose a la Concentración Nacional Herrerista, una facción de la derecha. Fue por ello que, junto con Dante Ronco Magnone, dirigió el periódico El Oriental, órgano de prensa de la CNH.

Hombre de pensamiento nacionalista católico, recibió la influencia de Julio Meinvielle por lo que repudió a la democracia cristiana de raíz maritaineana que se popularizó en Hispanoamérica en la segunda mitad del siglo XX (de igual modo fustigó a la teología de la liberación, engendro marxistoide que se gestó entre las filas democristianas). En Tribuna Cristiana, publicación de la cual fue editor, escribió sobre el daño que el Concilio Vaticano II le produjo al catolicismo. También en las revistas argentinas Roma y Verbo publicó artículos sobre la misma temática, recibiendo el elogio de Carlos Sacheri, quien lo invitaría a sumarse como colaborador al Instituto de Promoción Social Argentina.

Sus estudios de sociología, historia, economía, filosofía, teología y politología lo llevaron a ocuparse del problema del avance de la subversión en el mundo occidental. La lectura de la obra de Roger Trinquier le permitió introducirse en el campo de la guerra psicológica, de la que devendría un experto.

Entre 1972 y 1973 publicó una serie de artículos en el semanario montevideano Azul y Blanco, los cuales luego fueron recopilados en el volumen Psicopolítica, obra que fue muy leída en los círculos militares. Caviglia Cámpora, de hecho, dictó cursos de lucha antisubversiva a oficiales y compartió trabajos de investigación sobre procesos revolucionarios con las Fuerzas Armadas de su país, pero también con las Argentina, Paraguay y España.

Apoyó a Juan María Bordaberry en 1973 y por ello pasó a integrar la Junta de Vecinos de Montevideo. Sin embargo fue Aparicio Méndez quien lo valoró en su verdadera dimensión, promoviéndolo primero al Consejo de Estado -donde integró la Comisión de Defensa Nacional- y luego, entre 1979 y 1981, a la Embajada de Uruguay en Taiwan.  

En su años ancianos Caviglia Cámpora cultivó el interés por la literatura profética y apocalíptica de raíz cristiana, lo que plasmó en la obra Tercer Milenio: el misterio del Apocalipsis que escribió junto al sacerdote Antonio van Rixtel.

En el último cuarto de su vida siguió denunciando la degradación de la Iglesia Católica y la destrucción de las tradiciones nacionales. Llegó a polemizar con Monseñor Nicolás Cotugno, Arzobispo de Montevideo, por no condenar al Frente Amplio en la época de su ascenso electoral, como también a realizar una memorable apología de la familia ante el parlamento nacional cuando se discutía la modificación del Código Civil y a elaborar contundentes argumentos en contra de la legalización del aborto al ser el tema puesto en debate.

Falleció poco antes de cumplir los 90 años.

El escritor fue miembro del Instituto Uruguayo de Cultura Hispánica.

Psicopolítica

En una época en la que los grupos de izquierda habían llevado a la violencia política a niveles salvajes, Caviglia Cámpora advirtió que si las acciones terroristas se habían vuelto habituales se debía a que los enemigos de Occidente venían realizando una paciente y silenciosa labor de desmoralización de la sociedad. A esa estrategia la llamaba "psicopolítica", pues los subversivos entendían que sólo triunfarían si primero conquistaban las mentes de los individuos alterando el sentido común e invirtiendo los valores tradicionales.

Por ese motivo el intelectual uruguayo sostenía que la mera acción militar sólo serviría para desarmar a la subversión, pero no para detenerla ni anularla. La reacción ante el peligro que acosaba a Uruguay debía contemplar todo el ámbito doctrinal, es decir debía partir del afianzamiento de una antropología cristiana como base de la educación nacional para darle a los ciudadanos de su país las herramientas necesarias que podrían usar para no ser seducidos por las fuerzas destructivas.

Sus indagaciones sobre la teoría y la praxis del marxismo-leninismo le permitió concluir que esa doctrina no era más que una patología del espíritu, provocada por la soberbia intelectual o por deficiencias morales. Por ello sostenía que la masa obrera organizada era menos dañina y más fácil de controlar que los miembros de la clase media que cultivaban ideas progresistas, pues éstos tenían más poder. De allí que señalara que aquel libertinaje que favorecía la proliferación de la pornografía, de los divorcios y de la drogadicción era un arma más destructora que los arsenales con los que podía contar la guerrilla.

El antídoto que proponía para neutralizar al veneno subversivo era acabar con la falacia demoliberal que postula que el Estado debe ser una entidad neutra e imparcial, que proteja el pluralismo ideológico como si todas las doctrinas en pugna fuesen igual de válidas. Por el contrario, para Caviglia Cámpora el Estado debe asumir la misión de asistir a cada ciudadano en la adquisición y el desarrollo de sus virtudes, promoviendo lo deseable y bloqueando lo indeseable.

Bibliografía

  • Ps-P: Psicopolítica. Verdadera dimensión de la guerra subversiva. Montevideo: Ediciones Azules, 1974.
  • Tercer Milenio: el misterio del Apocalipsis. Buenos Aires: Gladius, 1995.

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