Gran Reemplazo

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El Gran Reemplazo (o Gran Sustitución) es un término usado por algunos problancos para referirse al genocidio blanco, con énfasis en el reemplazo demográfico, el cual consiste en el proceso progresivo de limpieza étnica por medio de la sustitución de las poblaciones europeas nativas por poblaciones no-europeas, provenientes mayormente de África y Asia. La transformación étnica implica también una transformación civilizatoria: nuevas leyes, nuevos paisajes, nueva vida pública, nueva vida privada, etc.

El concepto también puede ser aplicado en todos los países de mayoría blanca fuera del continente europeo que experimenten una situación similar –como sería el caso de EEUU, Australia o Argentina–, aunque en cada región el fenómeno inmigratorio tiene características específicas que lo vuelven diferente de su par europeo.

Origen

El término y su acepción tiene su origen en el escritor francés Renaud Camus quien lo popularizó en su libro Le Grand Remplacement (2011), siguiendo una reflexión del dramaturgo alemán Bertolt Brecht, quien afirmó que es más simple que los gobernantes cambien a su pueblo a que un pueblo cambie a sus gobernantes.

Camus señala que, con la complicidad o cooperación de las élites, las poblaciones europeas blancas están siendo reemplazadas demográfica y culturalmente por personas no blancas, especialmente inmigrantes provenientes de países de mayoría musulmana, a través de la criminal inmigración masiva, y el consiguiente crecimiento demográfico de los inmigrantes no blancos, sumado a la caída en la tasa de natalidad de los europeos blancos. Todo lo cual hará que en pocas décadas las ahora "minorías" se conviertan en mayorías en el territorio europeo. Paulatinamente naciones como la francesa, la española, la inglesa, la italiana, etc. dejarán de ser naciones racialmente europeas y culturalmente occidentales, lo cual lo describe como un 'genocidio por sustitución'.

Camus asoció la presencia de musulmanes en Francia con el peligro potencial y la destrucción de la cultura y la civilización francesas. Camus y muchos otros atribuyen este proceso a las políticas intencionales impulsadas por las élites globales y liberales (los "reemplazantes") desde dentro del Gobierno de Francia, instotuciones como la Unión Europea o la Organización de las Naciones Unidas son utilizadas como vehículos para llevar a cabo el plan sustituyente. Camus sostiene que el fenómeno, además, supone la industrialización ecocida, la desespiritualización de la educación y el embrutecimiento de las masas.

La alianza entre la izquierda cultural y la derecha económica está despojando a los occidentales de su identidad milenaria –fundada en una fusión de las tradiciones helénicas, cristianas, latinas y germánicas–, lo que aumenta la adopción del cosmopolitismo como matriz identitaria de los individuos adinerados y les da el islam como reacción a quienes no pueden acceder a ese mundo hiperconsumista. En ese escenario los blancos se convertirán en esclavos totales de la nueva hegemonía, o terminarán por desatar una guerra civil innecesaria y destructiva.

Historia

Según el historiador Laurent Joly, ya el escritor Maurice Barrès habría alertado sobre este perverso plan alrededor de 1900, por lo que se lo puede considerar como una más de las estrategias de tensión diseñadas por la masonería para hacer avanzar su agenda. El Plan Kalergi puede ser citado como un antecedente de la Gran Sustitución.

Poco antes de que Camus hablara de la Gran Sustitución y el movimiento identitario difundiese ampliamente la expresión, varios autores –como Alexandre del Valle por ejemplo– ya habían hecho circular la idea de Eurabia, la cual describe parcialmente la realidad del fenómeno.

Pruebas

Análisis demográfico

El Gran Reemplazo se puede constatar en Europa analizando los datos que arrojan las estadísticas en relación al ingreso de inmigrantes no-europoides a los países blancos, al número de nacimientos entre los miembros de estas poblaciones implantadas (contando también a los que son producto del mestizaje con los locales), y a la multiplicación de mezquitas y otros establecimientos civiles o comerciales que se ocupan de observar estrictamente los códigos islámicos de etiqueta y dieta: todos esos indicadores están en alza, y las proyecciones indican que –a menos que se tomen medidas para revertir la situación– los mismos seguirán creciendo a un ritmo mediano y constante a lo largo del siglo.

La demógrafa francesa Michèle Tribalat ha denunciado todo ello, aplicando métodos científicos de investigación –en Francia, por ejemplo, no hay estadísticas oficiales ni sobre el origen étnico ni sobre la religión que profesa cada uno de sus ciudadanos, pues, según su idea de republicanismo, se considera discriminatorio acopiar esa información; sin embargo Tribalat ha avanzado igual, calculando el número de negros en su país al analizar, por ejemplo, los registros de presencia de ciertas enfermedades genéticas que mayormente padece la raza melanoderma, como también ha podido demostrar el crecimiento del Islam midiendo entre los franceses recién nacidos el incremento del uso de nombres de pila cuyo origen está ligado a la cultura musulmana.

Informe de la División de Población de la ONU sobre la 'migración de reemplazo'

El 17 de marzo de 2000, la División de Población del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (DESA, por sus siglas en inglés) publicó un informe titulado "Migración de reemplazo: ¿es una solución ante la disminución y el envejecimiento de la población?".[1][2] Esta "migración de reemplazo" es colocada así como la "principal solución" para prevenir el declive y envejecimiento de la población como resultado de las bajas tasas de fecundidad.

Los nuevos desafíos de la disminución y el envejecimiento de la población requerirán una reevaluación integral de muchas políticas y programas establecidos, con una perspectiva a largo plazo incluyendo aquellos relacionados con la migración internacional y la integración de un gran número de migrantes recientes y sus descendientes.
El declive de la población es inevitable en ausencia de migración de reemplazo.

El informe examina detalladamente el caso de ocho países de baja fertilidad (Francia, Alemania, Italia, Japón, República de Corea, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos) y dos regiones (Europa y la Unión Europea). En cada caso, se consideran escenarios alternativos para el período 1995-2050, destacando el impacto que varios niveles de inmigración tendrían en el tamaño de la población y el envejecimiento de la población.

Evidentemente, todo este programa de migración masiva y forzada proveniente de países del Tercer Mundo, ha causado una eliminación étnica nativa parcial, dirigida gradualmente hacia una eliminación total.

Confesiones

Andrew Neather, un consultor de Tony Blair, publicó un artículo en octubre de 2009 en el que señala que la invasión inmigratoria que padeció el Reino Unido a fines del siglo XX y comienzos del XXI fue diseñada adrede por las autoridades políticas del país.

En 2015, durante una conferencia de la Casa Blanca, el entonces vicepresidente de Estados Unidos, el sionista gentil Joe Biden, afirmó abiertamente que:

La ola [de inmigrantes] aún continúa. No se va a parar, ni deberíamos querer que se detenga. De hecho, creo que es una de las cosas de las que podemos estar más orgullosos…
[Queremos] una corriente implacable de inmigración. Sin escalas. Gente como yo que es caucásica, de ascendencia europea, ¡por primera vez en 2017 seremos una minoría absoluta en los Estados Unidos de América! ¡Minoría absoluta! Menos del 50% de la población de Estados Unidos, a partir de ese momento, será de raza blanca europea. ¡Eso no es algo malo, esa es la fuente de nuestra fuerza!

—Joe Biden.[3]

Reacciones

Jean-Yves Le Gallou señaló que el concepto del "Gran Reemplazo" está penetrando en el imaginario popular de Europa gracias al trabajo de reinformación que los militantes identitarios realizan a través de la Internet. Debido a ello puede verse que no sólo los miembros del movimiento nacionalista usan el término, sino que políticos de la centroderecha y periodistas independientes también emplean la expresión.

Partidócratas, mediócratas y académicos islamoizquierdistas permanentemente intentan desacreditar a quienes difunden y demuestran la existencia de este proceso genocida, y procuran además trivializar el fenómeno aplicando técnicas de desinformación: una de ellas (aceptada, por ejemplo, por Florian Philippot) consiste en tildar de racista al concepto, en tanto que otra (suscrita por Marine Le Pen) busca desestimar al Gran Reemplazo acusándolo de ser sólo una teoría de la conspiración.

Influencia en ataques terroristas


Entre 2018 y 2022, cuatro ataques terroristas: el ataque a la sinagoga Tree of Life en Pittsburgh, Pensilvania de 2018, el tiroteo en la mezquita de Christchurch, Nueva Zelanda de 2019, el tiroteo de El Paso, Texas de 2019 y el tiroteo de Buffalo, Nueva York de 2022, han hecho referencia al "Gran Reemplazo" como parte de su motivación.

Camus y otros activistas blancos han condenado expresa y públicamente la violencia que se ha cometido en nombre de la raza blanca, no obstante, y a pesar de ello, ciertos tergiversadores y calumniadores profesionales han argumentado que "los llamamientos a la violencia están implícitos al representar a los inmigrantes no blancos como una amenaza existencial para las poblaciones blancas".

El problanco Bob Whitaker, cuya estrategia era verbal o conversacional, señalaba que la violencia en nombre de la raza blanca era contraproducente para combatir el genocidio blanco, pues esta alimenta y fortalece al sistema antiblanco, generando más aversión que simpatía hacia los ideales más nobles, los cuales se ven empañados.

Referencias

Artículos relacionados

Enlaces externos