Behemot y Leviatán

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Yahveh señalando a Behemot y Leviatán. Behemoth and Leviathan, acuarela de William Blake perteneciente a Ilustraciones del Libro de Job de William Blake.

En el Antiguo Testamento, Behemoth y Leviatán son los nombres de dos bestias colosales mitológicas mencionadas en el Libro de Job.

Behemot, Bahamuth o Bégimo (hebreo: בהמות) es una poderosa bestia herbívora terrestre cuyos “huesos son tubos de bronce, y sus miembros como barras de hierro” (Job 40:18).

Leviatán (hebreo לִוְיָתָן, liwyatan, 'enrollado') es una bestia marina gigante. Su creación por Dios se encuentra en el Génesis y Job describe su aspecto físico con semejanzas a un dragón.

Algunas fuentes identifican a Behemoth, que habita en los pantanos y no le asusta el turbulento río Jordán, como un hipopótamo y a Leviatán como un cocodrilo, una ballena o una serpiente.

Entre varias leyendas judías sobre el fin de los tiempos se relata que los judíos presenciarán una espectacular batalla entre Behemoth y Leviatán en la era mesiánica y luego se deleitarán con su carne en un festín.

Atestaciones

En el apócrifo Libro de Enoc Behemot y Leviatán son descritos así:

Y en ese día se separarán dos monstruos, una hembra llamada Leviatán, que morará en el abismo sobre donde manan las aguas, y un macho llamado Behemot, y ocupará con sus pechos un desierto inmenso llamado Dandain.
—Libro de Enoc

Behemot

La descripción más completa de Behemot se encuentra en el Libro de Job:

He aquí ahora Behemot, el cual hice como a ti; hierba come como buey. He aquí ahora que su fuerza está en sus lomos, y su vigor en los músculos de su vientre. Su cola mueve como un cedro, y los nervios de sus muslos están entretejidos. Sus huesos son fuertes como bronce, y sus miembros como barras de hierro. Él es el principio de los caminos de Dios; el que lo hizo puede hacer que su espada a él se acerque. Ciertamente los montes producen hierba para él; y toda bestia del campo retoza allá. Se echará debajo de las sombras en lo oculto de las cañas y de los lugares húmedos. Los árboles sombríos lo cubren con su sombra; los sauces del arroyo lo rodean. He aquí sale de madre el río, pero el no se inmuta. Tranquilo está, aunque todo un Jordán se estrelle contra su boca. Debajo de los lotos se revuelca, en la espesura de cañas y de juncos. Le cubren los lotos con su sombra, le rodean los sauces del torrente. ¿Lo tomará alguno cuando está vigilante,y horadará su nariz?

—Job 40:15-19.

Leviatán

La palabra "Leviatán" aparece en las siguientes citas bíblicas:

En aquel día Yahvé castigará con su espada dura, grande y fuerte al Leviatán serpiente veloz, y al Leviatán serpiente tortuosa; y matará al dragón que está en el mar.
—Isaías 27:1.
Rompiste las cabezas del Leviatán; y lo diste por comida a las tortugas de mar.
—Salmo 74:14.
Por allí circulan los navíos y Leviatán que hiciste para entretenerte.
—Salmo 104:26.
¿Sacarás tú al Leviatán con el anzuelo, o con cuerda que le eches en su lengua?
—Job 41:1.
Maldigan a los que maldicen el día, los que se aprestan para despertar a Leviatán.
—Job 3:8.

En el Talmud, el Leviatán es mencionado en Avodá Zará 3b:

Rav Yehuda dice, hay doce horas en un día. En las primeras tres horas Dios se sienta y aprende la Torá, las segundas tres horas él se sienta y juzga el mundo. Las terceras tres horas Dios alimenta al mundo entero... el cuarto periodo de tres horas Dios juega con el Leviatán.

También se menciona en Moed Katán 25b:

Rav Ashi le dijo a Bar Kipok: "¿qué será dicho en mi entierro?" Él contestó: "Si una llama puede derrumbar a un cedro, ¿qué esperanza tiene un árbol pequeño? Si un Leviatán se puede enganchar y acarrear a la tierra, ¿qué esperanza tiene un pescado en un charco?".

Sobre Génesis 1:21: "Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve", Rashi afirma que esto se refiere al Leviatán y su pareja, "ya que esta es la reencarnación de la serpiente de Adán y Eva". Según las leyendas judías, Dios creó un Leviatán macho y una hembra, pero luego mató a la hembra y la dio de comer a los "justos", "ya que si los leviatanes llegaran a procrear, entonces el mundo no podría interponérseles". Jastrow traduce la palabra "Taninim" como "monstruo marino, cocodrilo o gran serpiente".

Guerra de Gog y Magog

En las leyendas judías medievales sobre el fin de los tiempos, se dice que el monstruo terrestre Behemot (Job 40:15-24) y la serpiente marina Leviatán (Job 41) lucharán en un duelo sangriento en el que se debilitarán uno al otro hasta que Yahvé los mate dando su carne a los judíos que la consumirán en un festín, tal como dice el poema litúrgico del siglo XI conocido como Akdamut, compuesto por el rabino Meir bar Yitzchak ("el Nehorai") y recitado el primer día de la fiesta de Shavuot:

...se entrelazarán entre sí y entrarán en combate, con sus cuernos el Behemoth corneará con fuerza, el pez [Leviatán] saltará a su encuentro con sus aletas, con poder. Su Creador se acercará a ellos con su poderosa espada [y los matará a ambos]... de la hermosa piel del Leviatán, Dios construirá marquesinas para albergar a los justos, quienes comerán la carne del Behemoth y del Leviatán en medio de gran alegría y júbilo, en un gran banquete que se les ofrecerá.
—Akdamut

En el Apocalipsis siríaco de Baruc (29:4), se afirma que Behemoth saldrá de su reclusión en la tierra, y Leviatán del mar, y los dos monstruos gigantes, creados en el quinto día de la Creación, servirán de alimento a los elegidos que sobrevivirán en los días del Mesías.

Este festín simboliza la redención final de Israel a través de la matanza de ambas bestias, que son vistas como el cristianismo (Edom) (la talasocracia representada por el Leviatán), y el islam (Ismael), (la telurocracia representada por Behemot). Esta confrontación entre Occidente y Oriente ha sido promovida desde la judería medieval y se ha manifestado en las históricas luchas entre cristianos y musulmanes, así como entre el capitalismo y comunismo, en las cuales los judíos se han aliado con ambos bandos para enfrentarlos uno al otro para su destrucción mutua y que el judaísmo se convierta en la única fuerza dominante en el mundo.

El islam, aunque herético para el judaísmo, es visto como un baluarte de las leyes noájidas que predican el monoteísmo estricto, bajo el patronazgo de la serpiente de la santidad, Mesías ben David, en contra de los idólatras cristianos que rinden culto a la serpiente maligna, Satán-Samael bajo la forma de Jesucristo, Mesías ben Yosef.

El festival Judío de Sucot (festival de los tabernáculos) concluye con un rezo recitado antes de abandonar la sucá (cabaña provisional):

Mayor sea su voluntad, Señor nuestro Dios y Dios de nuestros antepasados, que apenas pues he satisfecho y he morado en esta sucá, así pueda yo tener mérito en el año que viene para morar en la sucá de la piel de Leviatán. El año próximo en Jerusalén.

Un comentario en este rezo en el Libro de rezos de Artscroll (p. 725) agrega: "El Leviatán era un pez monstruoso creado en el quinto día de la creación". Su historia se relaciona largamente en el Baba Bathra 74b del Talmud, donde se dice que "el Leviatán será destruido y su carne será servida como banquete para el honrado en el tiempo por venir, y su piel se usará para cubrir la tienda donde ocurrirá el banquete".

La leyenda dice que en el banquete después del Armagedón, el caparazón del Leviatán será servido como comida, junto con el Behemot y el Ziz, el pájaro gigante y amo del aire.

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