Héctor H. Hernández

De Metapedia
Saltar a: navegación, buscar
Héctor Humberto Hernández Sánchez (17 de febrero de 1943, San Nicolás, Argentina - 12 de octubre de 2021, San Nicolás, Argentina) fue un abogado, académico y ensayista argentino de pensamiento y militancia nacionalista católica.

Biografía

Hernández recibió en su juventud dos importantes influencias: la de su padre -con el que compartía nombre- que fue un ilustre educador, periodista y escribano de la ciudad de San Nicolás, y la del Padre Edmundo García Caffarena, cuya acción catequística encaminó a muchos hacia una vida ordenada por los valores cristianos.

Se formó como abogado en la sede rosarina de la Universidad Católica Argentina, graduándose en 1966. Diez años más tarde obtuvo el Doctorado en Ciencias Jurídicas en la sede porteña de la misma institución, donde también fue docente. Su tesis constituyó un análisis acerca de la Teoría Egológica del Derecho formulada por el jurista argentino Carlos Cossio, rival intelectual de Hans Kelsen.

Fue discípulo de Guido Soaje Ramos y de Carlos Alberto Sacheri, con quienes militó en el Movimiento Unificado Nacionalista Argentino y a quienes acompañó en el Instituto de Filosofía Práctica.

Interesado en la filosofía del derecho y en la filosofía política, Hernández trabajó como investigador para el CONICET entre fines de la década de 1970 y principios de la de 1980, siendo también profesor en las aulas de la Universidad de Buenos Aires durante ese periodo. En 1982 obtuvo una beca para estudiar a la obra de Luigi Taparelli en Italia.

Muy arraigado en su ciudad natal, trabajó para el Poder Judicial local desempeñándose como defensor oficial, fue miembro del comité de ética del Hospital Municipal San Felipe, y dictó clases en establecimientos educativos de nivel secundario, terciario y universitario de esa zona del norte de la provincia de Buenos Aires. Asimismo dirigió el Instituto de Filosofía del Derecho de la UFASTA, la institución que crease Aníbal Fosbery en 1992 en la ciudad de Mar del Plata, y en 1994 fue fundador junto a Alberto Abud, Armando Díaz, Mariano Morelli y Rafael Rossi del Centro Tomista del Litoral Argentino, heredero del Centro de Estudios San Jerónimo que impulsase Alberto García Vieyra con la intención de conformar una nueva universidad católica en la región mesopotámica argentina.

No ocultó jamás el amor por su patria ni sus convicciones religiosas. Por ello colaboró con el Centro Patriótico Comandante Luis Piedrabuena para difundir el nacionalismo, y defendió públicamente al Padre Miguel Ángel Regueiro cuando las fuerzas de ultraizquierda intentaron imputarlo de haber cometido crímenes de lesa humanidad por haber sido capellán militar en la década de 1970. Su preocupación por denunciar la ilegitimidad de la deuda externa de la Argentina lo llevó a confraternizar con Alejandro Olmos, a quien acompañó en diversos actos y conferencias.

Hernández fue miembro del Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Juan Manuel de Rosas, de la Sociedad Tomista Argentina, de OIKOS y del Centro de Estudios Universitarios del Rosario.

Dos de sus hermanos también se destacaron públicamente: el sacerdote católico Rafael Hernández y el futbolista Patricio Hernández.

Obra

A través de cientos de textos y conferencias, Hernández articuló una concepción solidarista de diversos tópicos de la filosofía práctica. Así, en sus libros Liberalismo económico y doctrina social económica católica (1991) y Ensayo sobre el liberalismo económico (1994) -ambos nacidos a partir de una polémica con el liberal Gabriel Zanotti-, aborda el tema de la economía desde una perspectiva católica antiliberal.

Muy famosa fue su polémica contra Antonio Caponnetto en torno al tema de si es correcto o incorrecto que los católicos participen de la vida política de un país si éste está sometido al régimen de la democracia liberal. Mientras que Caponnetto postulaba la incorrección de esa tesis, Hernández, en cambio, sostuvo la posición contraria, recordando que esa idea es defendida por Pío XII y citando casos de ilustres católicos para ejemplificar su punto (desde José Antonio Primo de Rivera y Cornelio Codreanu hasta José Manuel Estrada, Gustavo Martínez Zuviría, Rodolfo Irazusta, Jordán Bruno Genta y Aníbal D'Angelo Rodríguez entre otros).

Menos conocida pero igual de importante fue su contundente refutación a Alberto B. Bianchi, quien sostenía que durante el periodo en que la Confederación Argentina fue gobernada por Juan Manuel de Rosas el pensamiento constitucionalista había sido prácticamente erradicado de la esfera pública, cuando la realidad demuestra lo contrario.

Hernández también hizo contribuciones muy interesantes a la teoría del derecho. En obras como Valores y Derecho (1999) y Derecho subjetivo, derechos humanos: doctrina solidarista (2000) critica desde el catolicismo a la deriva que padeció en el mundo contemporáneo la doctrina de los derechos humanos, usada como instrumento para justificar todo tipo de aberraciones ideológicas. Del mismo modo, en El garantismo abolicionista (2014) y en otros textos similares ataca en muy duros términos a los intentos por destruir los fundamentos del derecho penal para desnaturalizar el concepto de propiedad privada, mientras que en muchos artículos y conferencias criticó al laicismo bajo la mirada de que no hay buena razones para negar que el Estado argentino manifieste abiertamente una orientación católica. En su monografía "Nuevo proceso penal, justicia y sentido común" (1988) cuestiona seriamente la idea del juicio oral como procedimiento judicial.

El ensayista también produjo una gran cantidad de textos en los que explica el fundamento jurídico y filosófico para defender la cultura de la vida, oponiéndose muy tajantemente a todas las formas de aborto. Asimismo escribió en contra de la destrucción de la familia, denunciando como en la Argentina se atentó sistemáticamente contra la institución más importante de la sociedad desde la legalización del divorcio en 1987 hasta la aprobación del homonomio en 2010.

Sus obras en las que defiende que Carlos Alberto Sacheri sea reconocido como un mártir cristiano por la Iglesia Católica son también de gran valor, pues allí no sólo se rescata la figura del filósofo argentino y se explica su pensamiento, sino que además se ilustra el clima que se vivió en su país durante aquellos años en que las fuerzas subversivas tomaron las armas.

Hernández publicó sus artículos en revistas como Palabra, Anfiteatro, Sapientia, Ethos, Theotokos, Jurisprudencia Argentina, La Ley, Mikael, Philosophica, Moenia, Prudentia Iuris, Gladius, Verbo, Filosofar Cristiano, Cuadernos de Espiritualidad y Teología, Doctrina para el Movimiento Nacional y Diálogo, y en periódicos como El Norte de San Nicolás, La Capital de Rosario y de Mar del Plata, y La Nueva Provincia de Bahía Blanca. Además fue director de los números dedicados a la filosofía del derecho de la prestigiosa revista El Derecho.

Bibliografía

  • La justicia en la Teoría Egológica del Derecho. Buenos Aires: Abeledo-Perrot, 1980.
  • Estudio sobre Taparelli. Buenos Aires: INFIP, 1984.
  • Familia, Sociedad, Divorcio. Buenos Aires: Gladius, 1986.
  • Justicia y "deuda externa" argentina. Santa Fe: UCSF, 1988.
  • Liberalismo económico y doctrina social económica católica. Buenos Aires: Gladius, 1991.
  • Ensayo sobre el liberalismo económico. Buenos Aires: Centro Bellarmino, 1994.
  • Valor y Derecho. Buenos Aires: Abeledo-Perrot, 1999.
  • Derecho subjetivo, derechos humanos: doctrina solidarista. Buenos Aires: Abeledo-Perrot, 2000.
  • Sacheri: predicar y morir por la Argentina. Buenos Aires: Vórtice, 2007.
  • El garantismo abolicionista. Buenos Aires: Marcial Pons, 2013.
  • Pensar y salvar la Argentina. Mendoza: Escipión, 2016.
  • Inseguridad y garantismo abolicionista. Buenos Aires: Cathedra Jurídica, 2017.
  • La discusión académica: historia del Centro Tomista del Litoral Argentino. Santa Fe: CENTOLIAR, 2017.
  • Sacheri y el mandato argentino. Mendoza: Escipion, 2017.
  • Salvar vidas con el Derecho Penal. Buenos Aires: Círculo Rojo, 2018.

Artículos relacionados

Enlaces externos