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Manif Pour Tous
Se trata de un movimiento apolítico y aconfesional, que sólo por cuestiones técnicas se convirtió en un partido en 2015.
Sumario
Origen
Contexto
El 15 de agosto de 2012 el Ministerio de Justicia de Francia presentó oficialmente un proyecto de ley ante la Asamblea Nacional que proponía ampliar el matrimonio en el país para que esta práctica deje de ser exclusiva de parejas formadas por hombres y mujeres, posibilitando así que un hombre pueda casarse con otro hombre, o una mujer con otra mujer. Además, esa misma ley implicaba que una unión matrimonial anormal como la formada por dos hombres o dos mujeres pasaría a ser considerada como cualquier otra unión matrimonial por el Estado francés, permitiéndose en consecuencia que parejas del mismo sexo procreen niños a través de diversas técnicas médicas o directamente los adopten en calidad de hijos.
Fundación
El origen de MPT se remonta a la jornada del 5 de septiembre de 2012, cuando alrededor de cincuenta líderes civiles representantes de diversas organizaciones no gubernamentales se reunieron con filósofos, psicólogos, sociólogos y funcionarios del Estado con el fin de definir una estrategia común para detener el proyecto de ley que buscaba legalizar el matrimonio homosexual y la adopción de niños por homosexuales en Francia.
El nombre escogido para bautizar al colectivo –"Manifestación para Todos" en español– nació para dejar en claro que querían ser la contracara de la avanzada homosexualista, la cual pretendía imponer el "matrimonio para todos" (eufemismo usado para referirse a la perversión de la idea de matrimonio).
Quienes fueron escogidos para obrar como voceros del movimiento fueron Tugdual Derville, Lionel Lumbroso, Camel Bechikh, Philippe Brillault, Antoine Renard, Franck Meyer, Laurence Tcheng, Xavier Bongibault, Béatrice Bourges y la humorista Frigide Barjot.
Composición
MPT es un movimiento con presencia en todo el territorio francés. Dada su naturaleza confederativa, su composición es heterogénea, formada mayormente por asociaciones civiles laicas confesionales (especialmente cristianas y musulmanas) y aconfesionales. Además participan grupos feministas y homosexualistas que no comulgan con el Nuevo Orden Mundial.
El colectivo también ha recibido el apoyo expreso de diversas personalidades francesas.
Organizaciones laicas aconfesionales
El grueso de las organizaciones que componen MPT son laicas y de carácter aconfesional.
Algunas agrupan individuos para trabajar por una causa específica: SOS Papa nació para alertar sobre el síndrome de alienación parental, Cosette et Gavroche y Parti des Enfants du Monde promueven la protección de la niñez, Alliance VITA combate el aborto y la eutanasia, Enfants du Mékong recauda dinero para financiar la escolarización de niños en el Sudeste Asiático, Marche Solidaire ofrece alimentos de calidad a bajo precio, CLER Amour et Famille brinda educación afectiva a jóvenes y adultos, etc.
Otras organizaciones, en cambio, reúnen a profesionales de un área determinada que buscan evitar ser cómplices de la decadencia moral: AP21 agrupa a psicólogos, Appel des Médecins de l’Enfance et de l’Adolescence agrupa a médicos, y La Manif des Juristes agrupa a abogados.
Finalmente también hay asociaciones que congregan a personas con un trasfondo común, las cuales están dispuestas a comprometerse con distintas causas sociales, como es el caso del colectivo Les Adoptés, que, reuniendo a personas que han sido adoptadas, se ocupa de trabajar alrededor de una agenda de promoción de la cultura de la vida, o la Fédération Nationale de la Médaille de la Famille Française, una ONG constituida por gente que ha sido públicamente reconocida por el Estado francés por haber formado y sostenido con dignidad a familias numerosas y que habitualmente colabora en la tarea de asistir moral y materialmente a personas que lo necesiten.
Organizaciones laicas cristianas
La MPT cuenta con el apoyo de la Confédération Nationale des Associations Familiales Catholiques y de la Fédération Nationale des Associations Familiales Protestantes, dos asociaciones civiles de gran envergadura que, respectivamente, reúnen a católicos y protestantes franceses para presionar al Estado.
También participa del colectivo el centro de estudios Dialogue et Humanisme, una ONG dedicada a difundir la obra de pensadores cristianos.
Ecologie Humaine –un think tank dedicado al estudio del desarrollo humano sustentable– y Familles de France –un sindicato de familias– son organizaciones con fuertes vínculos con el Opus Dei.
Organizaciones laicas musulmanas
MPT contó con el apoyo de diversas organizaciones representantes de la comunidad musulmana de Francia, las cuales colaboraron con ellos fundamentalmente movilizando gente durante la realización de diversas manifestaciones en oposición a la legalización del matrimonio gay. Los grupos musulmanes más destacados aliados a MPT fueron la Union des Organisations Islamiques de France (UOIF), asociada a los egipcios de la Hermandad Musulmana, y Participation et Spiritualité Musulmanes (PSM), rama francesa del movimiento marroquí Justicia y Caridad.
Camel Bechikh, presidente de Fils de France, es otra personalidad musulmana muy ligada a MPT, habiendo llegado a ser designado uno de los voceros del movimiento.
Debido a la presencia de esos grupos y personajes de sospechosa lealtad a Francia, intelectuales nacionalistas como Hervé Ryssen y Bernard Antony criticaron duramente al colectivo y exhortaron a crear un movimiento paralelo para que la causa antigay no quedase monopolizada por ellos.
Homosexualistas y Feministas
Algo curioso de MPT es que el movimiento contó con la adhesión de grupos de homosexuales y de mujeres que se reconocen como militantes de sus respectivas causas, pero que consideran que las mismas no pueden ser impulsadas fructíferamente por quienes habitualmente las impulsan, ya que ellos sólo contribuyen a subvertir a la cultura occidental, apuntando a destruirla definitivamente. Tal fue el caso de Homovox, Plus Gay sans Marriage y Gay pour la Vie !, como también de Nouveau Féminisme Européen y Woman Attitude.
Personalidades destacadas
Muchos ciudadanos franceses han manifestado su apoyo y adhesión a Manif Pour Tous a título personal. Varios de ellos son gente reconocida en Francia por diversos motivos: académicos e intelectuales (Rémi Brague, Xavier Lacroix, Thibaut Collin, Philippe d’Iribarne, Yves-Charles Zarka, Emmanuel Ducamp, Denis Tillinac y Saïd Nourdine-Mlanao), empresarios (Charles Beigbeder), profesionales de la salud (Jean Langlois, Vincent Rouyer y René Pugeault), personalidades mediáticas (Jean-Jacques Peroni y Viviane Blassel), y antiguos políticos y funcionarios (Marie-Thérèse Hermange, Patrick Hénault, Roland Hureaux, Georgina Dufoix, Jérôme Vignon y Christine Boutin).
Historia
Manifestaciones contra la legalización del matrimonio homosexual
El 17 de noviembre de 2012 MPT organizó una manifestación en diversas ciudades de Francia, siendo París su epicentro (en la capital francesa se llegaron a reunir 200.000 personas para repudiar la despatologización de la homosexualidad).
El 13 de enero siguiente 1.000.000 de personas marcharon en París convocadas por MPT. La cifra alarmó a los progresistas, que prepararon contra-ofensivas absurdas como el demandar al colectivo para que abone los daños ocasionados sobre el césped del parque Campo de Marte, cosa que jamás hacen con respecto a otras manifestaciones (como es el caso, por ejemplo, de la marcha homosexualista organizada anuamnete por el Día del Orgullo Gay).
En el mes de febrero la organización presentó un petitorio firmado por 700.000 ciudadanos ante el Consejo Económico, Social y Ambiental, un órgano consultivo que interviene en el proceso de elaboración y sanción de leyes en Francia; sin embargo los burócratas a cargo del mismo rechazaron el petitorio aduciendo un tecnicismo, lo que desató la furia entre los activistas antigays.
El 24 de marzo toda Francia se vio conmovida al ver como 1.400.000 personas se congregaron en el eje histórico de París para defender a la familia. En esa ocasión hubo incidentes entre los manifestantes y la policía francesa. La repercusión mediática de ese episodio obligó a MPT a reorganizarse: por un lado Frigide Barjot perdió su rol de conductora del movimiento y fue reemplazada por Ludovine de La Rochère –mujer vinculada a la Conferencia Episcopal Francesa y a la Fondation Jérôme-Lejeune–, conservando únicamente su papel de intermediaria entre el movimiento y la prensa francesa; y por el otro lado Béatrice Bourges fue expulsada de MPT por haber llamado a invadir la sede del Poder Ejecutivo francés como respuesta a la represión policial (allí nacería el movimiento Printemps Français y se elaboraría la estrategia de las vigilias pacifistas).
La asombrosa magnitud de la manifestación del 24 de marzo de 2013 puso nervioso al Lobby Homosexual, por lo que éste presionó violentamente al gobierno para que acelere la modificación del Código Civil con el fin de permitir el matrimonio entre gente del mismo sexo. Después de la golpiza que sufrió el joven Samuel Lafont a manos de fanáticos homosexualistas en los días posteriores al 24, hubo una radicalización del movimiento antigay. Varios políticos sufrieron escraches y hasta la feminista mediática Caroline Fourest aprovechó la ocasión para sembrar el odio tras inventar una historia de que había sido acosada por miembros de MPT. El progresismo acusó al colectivo de incitar a la guerra civil, cuando en realidad sus líderes estaban intentando conservar la paz.
El 21 de abril, día de la primavera, 270.000 personas volvieron a responder a MPT en París.
Mayo de 2013 fue el mes que vio producirse la aprobación de la ley homosexualista en Francia. Si bien el 17 fue cuando se realizó la votación en la Asamblea Nacional, el 26 fue el día en que el presidente François Hollande ratificó la decisión del Poder Legislativo. Ese día MPT volvió a reunir a 1.000.000 de personas en la capital francesa, pese a que el gobierno había intentado intimidar a la gente dando a entender que podría desencadenarse una brutal represión hacia los manifestantes. Los únicos incidentes que se registraron, empero, tuvieron como protagonistas a los homosexuales de MPT y a militantes de la Œuvre Française y del Bloc Identitaire (estos últimos previamente habían ocupado una sede del Parti Socialiste para pedir la renuncia del presidente de Francia).
Al final de la jornada, Frigide Barjot fue completamente apartada del movimiento por haber sugerido que, tras el anuncio de Hollande de que no vetaría la ley, la nueva lucha sería la de tornar al matrimonio homosexual en una suerte de unión civil reconocida por el Estado. Su lugar lo terminó por asumir Ludovine de La Rochère, convertida ahora en líder y vocera de MPT, quien sostuvo que tal unión civil no es aceptable bajo ningún punto de vista. Barjot fundó Avenir pour Tous, llevándose de MPT al sector más progresista consigo.
Desarrollos posteriores
Entre junio de 2013 y diciembre de 2014 hubo un debate interno en MPT. La derrota en su causa era evidente, pero ello no justificaba el desmantelamiento de una estructura cada vez más afianzada, construida y sostenida con el aporte de numerosos donantes y voluntarios. El colectivo organizó varias nuevas manifestaciones en toda Francia exigiendo la derogación de la ley que legaliza los matrimonios homosexuales, siendo las más importantes de ellas la del 2 de febrero y la del 5 de octubre de 2014 (las cuales reunieron a 500.000 personas cada una). A su agenda se le sumó el repudio a la presencia de la ideología de género en las escuelas públicas, y la oposición a la fecundación artificial (por el tratamiento homicida que ésta hace de los óvulos fecundados) y al alquiler de vientres (por ser una modalidad de comercialización del cuerpo humano). También promueven ampliar el concepto de objeción de conciencia para aplicarlo en diversos ámbitos sociales.
En abril de 2015, Manif Pour Tous se convirtió oficialmente en un partido político con el propósito de aprovechar el régimen impositivo especial que rige en Francia sobre esas organizaciones. Más allá de eso, los dirigentes del colectivo han manifestado su intención de seguir funcionando como una agrupación metapolítica.
En octubre de 2016 el colectivo tomó nuevamente las calles de París para manifestarse en contra de los proyectos de ley favorables a facilitar el alquiler de vientres.
Estrategias
MPT apuesta a movilizar a la gente para tomar las calles de Francia y hacer oír su voz. Sin embargo las grandes manifestaciones requieren de tiempo y esfuerzo para producirse. Para no gravitar sobre la inactividad pública y la cybermilitancia únicamente, MPT organiza permanentemente vigilias en diversas ciudades francesas. Las mismas consisten en reuniones en espacios públicos (generalmente en las cercanías de alguna sede gubernamental), donde se realizan sentadas alrededor de velas. Este tipo de protesta pacífica suele iniciarse durante el atardecer y supone varias horas de "vigilia", en la que los participantes leen textos literarios mientras los demás escuchan en silencio.
Una variante de las vigilias son protagonizadas por los centinelas: gente que en lugar de sentarse en el suelo, permanecen parados y en silencio mientras observan un determinado objetivo durante horas.
Esa modalidad de protesta se realizó cuando fue detenido el joven Nicolas Bernard-Busse, un participante de una vigilia al que la policía francesa encerró sin motivos, acusándolo de resistirse violentamente a la detención y de falsificar su identidad ante la autoridad pública (y que luego sería multado y condenado a dos meses de reclusión efectiva por la Justicia sin haber hecho méritos para ello, convirtiéndose por tanto en un preso político del supuesto régimen democrático de Hollande).
En más de una ocasión las vigilias han sido interrumpidas de forma violenta por subversivos a favor de aquello que MPT repudia.
Además de las protestas, MPT organiza jornadas de debate y cursos de formación para producir líderes de la sociedad civil con sólidos valores morales.
Papel político en Francia
Aunque oficialmente apolítica, MPT ha contado con el apoyo de diversos hombres y mujeres de la política partidaria francesa desde sus comienzos. No sólo políticos retirados se adhirieron al movimiento, también los activos hicieron lo mismo. El Collectif des Maires pour l'Enfance (CRE) y la Entente Parlementaire pour la Famille (EPF) son dos agrupamientos de miembros del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo que valoran positivamente la existencia de MPT. Ambos colectivos están integrados mayormente por gente perteneciente a las derechas de Francia, aunque hay varios también que provienen de fuerzas centristas e izquierdistas.
Debido al hecho de que Manif Pour Tous y Civitas fueron las únicas organizaciones que convocaron a la realización de marchas para repudiar la iniciativa de legalización del matrimonio homosexual, los políticos en actividad que deseaban acompañar a la sociedad que protestaba debían escoger entre participar de una u otra convocatoria. Dado que Civitas era acusado de ser un grupo de extrema derecha por parte de la prensa francesa, entonces los partidócratas escogieron marchar junto a MPT.
La presencia de los diputados Marion Le Pen, Jacques Bompard y Gilbert Collard fue interpretada por algunos politólogos como el nacimiento de un frente amplio de la derecha, pero los más moderados del sector negaron rotundamente esa posibilidad.
En los primeros eventos organizados por MPT se prohibió que las fuerzas partidarias llevasen insignias que los identificasen, dando a entender que el movimiento no empujaba a ninguna candidatura en particular. A su vez los líderes de MPT se dieron el lujo de seleccionar a sus adherentes, repudiando por ejemplo la presencia del antiguo diputado Christian Vanneste, quien es famoso en Francia por haber sido condenado judicialmente por haber incurrido en el supuesto delito de homofobia (de todos modos se aceptó que Famille et Liberté, la ONG que dirige Vanneste, fuese parte de MPT).
Desde junio de 2013, ante cada elección de autoridades MPT elabora una "carta de compromiso" en la cual se enuncia una serie de principios morales. Los candidatos que firman dicho documento se comprometen públicamente a promover y defender a los mentados principios una vez elegidos. Miles de políticos se unieron a la iniciativa en los últimos años, la mayoría de los cuales se presentó a elecciones como candidatos independientes o como incorporados a alguna lista partidaria derechista (en agrupaciones importantes como Les Républicains o Front National, y en movimientos menores como Debout la France, Parti de la France, Nouveau Centre o Chasse, Pêche, Nature et Traditions). Para algunos analistas esto constituye una plataforma de convergencia ideológica que ayuda a promover una visión clara de la sociedad en la que se desea vivir, lo que dificulta considerablemente el trabajo del Lobby Homosexual.
Christine Boutin, creadora del Parti Chrétien-Démocrate, y Jean-Claude Martinez, creador de Maison de la Vie et des Libertés, formaron en 2014 la alianza Force Vie para promover la agenda de MPT de modo autónomo sobre el terreno político. A su vez el empresario Charles Beigbeder fundó el think tank Sens Commun para operar dentro de Les Républicains (el partido más grande de la derecha francesa) y condicionar a su próximo candidato a presidente de Francia.
En las elecciones presidenciales de 2017 la MPT apoyó a François Fillon en la primera vuelta, y luego hizo campaña en contra de Emmanuel Macron durante la segunda.
Influencia internacional
MPT emocionó a gente fuera de Francia. Católicos de diversas partes del mundo apoyaron de diversas maneras a la organización mientras daba el combate al Lobby Homosexual. La National Organization for Marriage de EEUU se solidarizó con su lucha desde el primer momento.
En julio de 2013 un grupo de croatas tomaron las calles de su país inspirados en sus pares franceses para exigirle al gobierno que no denigre el concepto de matrimonio, logrando con ello impulsar la realización de un histórico referéndum que le puso un freno a la avanzada homosexualista en su país, al permitirle al pueblo que decida sobre sí mismo (en lugar de que ello quede en manos de las oligarquías económicas, mediáticas y políticas como habitualmente ocurre).
Los dirigentes de MPT comenzaron a brindar asistencia técnica a otros ciudadanos europeos a partir del segundo semestre de 2013. Así Italia vio nacer a Generazione Famiglia y en Finlandia se formó Aito Avioliitto para exigir la erradicación de la ideología de género de las escuelas y la abolición del matrimonio homosexual. En Alemania se constituyó el colectivo Demo für Alle para movilizar a la gente de su país.
La manifestación del 2 de febrero de 2014 –la cual no contó con el apoyo ni de Printemps Français ni de Avenir pour Tous– tuvo réplicas en Italia, España, Bélgica, Polonia y Rumania.
Ludovine de La Rochère accedió a una entrevista privada con el Papa Francisco en junio de 2014, la cual no fue muy fructífera para el movimiento pero al menos sirvió para demostrarle al Sumo Pontífice de la cristiandad el poder de los laicos franceses.
En julio de 2015 el partido Rusia Unida –fuerza liderada por Vladimir Putin– propuso la creación de una Bandera Internacional de la Heterosexualidad, la cual utiliza el logotipo de MPT. Los rusos aseguraron contar con el permiso de la organización francesa, pero ello fue desmentido después.
Campaña de difamación
MPT es víctima de una campaña sistemática de difamación motorizada por todo el arco subversivo de Francia y apoyada por la mayor parte de la prensa local e internacional. Debido a ello se acusa a la organización de ser "homófoba", cuando sus voceros han aclarado que no están en contra de la persona homosexual sino contra la legitimación social de su sexualidad desviada. Frigide Barjot fue quien más se esforzó en mostrarse amistosa con los homosexuales, quienes le respondieron con actos provocativos y agresivos.
Tampoco faltaron los que acusaron a MPT de ser racistas, debido a que algunos militantes efectuaron humoradas contra Christiane Taubira, una mujer negra que oficia de Ministra de Justicia de Francia (concretamente un usuario de Twitter subió una imagen de la funcionaria representada como una gorila gigante enfrentada a una multitud y unos adolescentes que participaban de una manifestación de MPT le arrojaron bananas en una visita que ella hizo a la ciudad Angers).
Otras acusaciones sindican a MPT como "maltratadores de animales" por haber soltado gallinas frente a la Asamblea Nacional para acusar a los diputados franceses de cobardes, y también de "instrumentalizadores de niños", debido al hecho de que muchos militantes asistían a las manifestaciones en compañía de sus hijos.
Impacto cultural
Manif Pour Tous es el movimiento social más grande que ha visto desarrollarse la Quinta República Francesa. Hay quienes lo juzgan como la inversión del Mayo del 68, evento que subvertió la matriz de valores del país, favoreciendo el desarrollo de generaciones de materialistas y hedonistas funcionales al Nuevo Orden Mundial.
Algunos analistas juzgan a MPT como la versión francesa del Tea Party, fenómeno que de ser cierto sería algo inédito en la Francia contemporánea, la cual no ve surgir una iniciativa real de poder ciudadano desde la ebullición del poujadismo en la década de 1950.
Muchos izquierdistas temen que MPT represente una invasión religiosa en el campo de la política, anulando de ese modo el laicismo que reina en la república desde que en 1905 se dictase una ley para separar oficialmente al Estado francés de la Iglesia Católica.
El filósofo Thibaut Collin sostiene que la organización es sólo la expresión final de hartazgo frente a una concepción de la política posmoderna que pretende sustituir los fundamentos antropológicos más elementales que mantienen unida a la sociedad occidental desde hace siglos.
