Vladímir Zhirinovski

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Vladímir Zhirinovski

Vladímir Vólfovich Zhirinovski (25 de abril de 1946, Alma Ata, URSS - 6 de abril de 2022, Moscú, Rusia) fue un político nacionalista ruso, líder del Partido Liberal Democrático de Rusia. Su figura fue muy popular en su país desde la caída de la Unión Soviética hasta su muerte más de tres décadas después. El propio Zhirinovski atribuía su éxito al hecho de que era un hombre independiente, sin nostalgia por el comunismo pero sin deseo de importar el liberalismo, y sin vínculo alguno con los empresarios oligarcas o las mafias organizadas.

Juventud

Zhirinovski nació en la República Socialista Soviética de Kazajistán como hijo de Volf Eidelstein y Alexandra Makarova. Su padre, un judío de Volinia, había sido deportado a Alma Ata tras la anexión que los soviéticos hicieron de los territorios orientales de Polonia en 1939, mientras que su madre era una mujer rusa que había enviudado de su esposo Andrei Zhirinovski, un funcionario estatal. Poco después del nacimiento de Vladimir, Eidelstein volvió a Polonia y luego emigró a Israel, perdiendo todo contacto con su hijo y la madre del mismo. En consecuencia el niño adoptó el apellido Zhirinovski, que era el apellido que tenían sus hermanos.

Tras culminar sus estudios básicos, se enroló en la Universidad Estatal de Moscú donde estudió turco, convirtiéndose en traductor e intérprete de ese idioma. En paralelo también se especializó en el área de relaciones internacionales en la Universidad del Marxismo-Leninismo. Esa educación le abría las puertas a una carrera como diplomático, por lo que en 1968 fue enviado a Turquía para desempeñarse como traductor de una delegación soviética que estaba construyendo una planta metalúrgica en Alejandreta. Sin embargo al año siguiente fue expulsado del país asiático tras ser acusado de realizar actividades de propaganda comunista.

Zhirinovski siguió ligado a los organismos diplomáticos soviéticos hasta 1975. Posteriormente se graduaría con honores como abogado en la Universidad Estatal de Moscú y se dedicaría a la práctica de su profesión.

Actividad política

Creación del Partido Liberal Democrático de la Unión Soviética

En mayo de 1988 el abogado participó de la fundación de la Unión Democrática, el primer partido opositor oficial de la URSS. Sin embargo poco después lo abandonó para crear al Partido Liberal Democrático de la Unión Soviética junto al compositor Vladimir Bogachev. El PLDUS fue oficialmente reconocido por las autoridades estatales en abril de 1991, luego de que los servicios de inteligencia constataran que no representaban un vehículo de los intereses extranjeros y que sus miembros no tenían planeado desmantelar a las Fuerzas Armadas Soviéticas (a raíz de ello se instaló la idea de que el partido era una fuerza política títere, controlada por la KGB).

Zhirinovski fue candidato a presidente de la República Socialista Federativa Soviética de Rusia en junio de 1991, quedando en el tercer puesto tras obtener el 7,81% de los votos. Un par de meses después estuvo involucrado en el fallido intento de golpe de Estado contra Mijail Gorbachov, manifestándole públicamente su apoyo al Comité Estatal para el Estado de Emergencia. En diciembre de aquel 1991 participó de las manifestaciones en oposición a la disolución de la unión de los países que integraban la URSS.

Líder del Partido Liberal Democrático de Rusia

Cartel en el que publicita su candidatura presidencial.

Con la desaparición de la URSS, la estructura política que Zhirinovski dirigía pasó a denominarse Partido Liberal Democrático de Rusia. Estableció contactos con Jean-Marie Le Pen y otros nacionalistas franceses, quienes le brindaron asesoramiento en la organización de su fuerza.

El abogado ganó en 1993 una banca en la Duma, la cual conservaría hasta el momento de su muerte casi 30 años después. De ese modo terminó convirtiéndose en un protagonista de la política rusa, siendo también una cara muy visible en los medios masivos de comunicación del país. Debido a su fuerte carácter, estuvo involucrado en más de una decena de incidentes contra periodistas y políticos que incluyeron furiosas agresiones verbales y/o violencia física.

Se opuso con gran fervor y vehemencia a Boris Yeltsin. Con Vladimir Putin, en cambio, tuvo una relación más pacífica, asegurando que el PLDR era la única de las fuerzas opositoras que era realmente leal al pueblo ruso, mientras que el resto sólo buscaban acabar con el putinismo para impulsarse a si mismos o a sus amos.

Fue candidato a presidente de la Federación Rusa en cinco ocasiones: 1996, 2000, 2008, 2012 y 2018, obteniendo un apoyo popular que osciló entre el 2,70% (elección de 2000) y el 9,35% (elección de 2008). En 1999 intentó también ser electo gobernador del Oblast de Belgorod, pero perdió ante Yevgeny Savchenko.

La Unión Europea lo colocó formalmente en su lista de enemigos en 2014 luego de que apoyara la anexión de Crimea a Rusia. Propuso durante años que su país invadiera a Ucrania para ponerle fin a las tensiones que existían entre ambas naciones y, en diciembre de 2021, predijo durante una intervención parlamentaria que el 22 de febrero de 2022 finalmente se desencadenaría la tan anticipada guerra ruso-ucraniana (sólo le erró por dos días).

Fallecimiento

A comienzos de septiembre de 2020 el político, habiéndose ofrecido como voluntario, recibió una dosis de Sputnik V. Tres semanas después volvió a ser vacunado con el mismo medicamento contra el COVID-19. No conforme con ello, en diciembre de ese año se aplicó la vacuna Sputnik Light. Y al año siguiente aceptó colocarse cuatro dosis de CoviVac. Pese a estar sobrevacunado, en febrero de 2022 fue internado en un hospital de Moscú con un cuadro de neumonía bilateral producido, según los médicos, por la variante omicrón del SARS-CoV-2. Falleció dos meses después.

A su funeral asistieron representantes de todas las fuerzas políticas de Rusia, incluyendo al presidente Vladimir Putin.

Zhirinovski era padre de tres hijos, dos de los cuales eran extramatrimoniales. Ninguno de sus descendientes llevaba su apellido.

Además de haberse dedicado a la política, Zhirinovski estuvo involucrado en diversos emprendimientos productivos y comerciales, usando su apellido para vender vodka, cigarros, colonia para hombres, té y suplementos vitamínicos. Asimismo fue autor de 40 libros -uno de los cuales fue su tesis con la que obtuvo el título de Doctor en Sociología por la Univerisdad Estatal de Moscú en 1998-, grabó cuatro discos y actuó en algunas obras de teatro, películas y series de televisión.

Pensamiento político

Verticalismo

Zhirinovski sostenía que el presidencialismo adoptado en Rusia era una fallida adaptación del sistema político de los Estados Unidos y de Francia, y que sólo servía para generar un gobierno débil. En consecuencia predicaba la creación de un régimen ultraverticalista y autocrático, con una cabeza de Estado virtuosa, que concentrase el poder alrededor suyo y fuese asistido por las mentes más brillantes del país. Una de sus principales promesas en sus campañas era la de acabar para siempre con la elección del presidente. A raíz de ello Zhirinovski fue calificado como "monarquista" por algunos politólogos, sobre todo luego de que en agosto de 2014 propusiera que se creara el cargo de "Gobernante Supremo" y se sustituyera la bandera rusa blanca, roja y azul por la negra, amarilla y blanca que estuvo vigente entre 1858 y 1896 por imposición del zar Alejandro II. Pese a ello en varias ocasiones Zhirinovski también afirmó que Rusia debía estar regida por una asamblea nacional en la que cada facción política tuviese el poder de designar y revocar a la cabeza de Estado, en una especie de régimen a mitad de camino entre el parlamentarismo y el corporativismo.

El líder del PLDR se oponía a la existencia de república autónomas dentro de Rusia, proponiendo en su lugar la creación de grandes regiones que centralizasen el poder y controlasen el territorio (lo cual, por otro lado, serviría para combatir al separatismo). Lógicamente ello lo llevaba a afirmar que era también necesaria una drástica reducción de los cargos electivos.

Anticomunismo

Zhirinovski era un ferviente anticomunista. Consideraba que el Partido Comunista de la Federación Rusa mantenía vigente el ideario del Partido Comunista de la Unión Soviética y que su triunfo electoral se traduciría en un retorno del antiguo régimen, con la persecución del cristianismo y la reducción de las libertades económicas de los ciudadanos.

Criticó con dureza a Lenin y a Stalin, asegurando que éste último gozaba de buena reputación entre los jóvenes nacionalistas rusos por el trabajo de mitificación que se había producido en torno a su figura (a Stalin llegó a criticarle que hubiese entrado en una alianza con los capitalistas durante la Segunda Guerra Mundial, cuando, según su opinión, la URSS tenía el poder suficiente como para invadir Alemania, Francia, Italia e incluso España). En su lugar le recomendó a la juventud estudiar a la figura de Piotr Stolypin, un político asesinado en 1911 al que consideraba el mejor modelo de estadista que ha dado la Rusia moderna.

Rigorismo

Ante las actividades de organizaciones terroristas, Zhirinovski era partidario de establecer un gigantesco equipo de vigilancia bajo supervisión de las fuerzas de seguridad del país que, literalmente, controlara el sistema de transporte y de telecomunicaciones para detectar y reprimir a las fuerzas anti-rusas.

Asimismo en 2009, durante los debates acerca de reactivar la pena de muerte en Rusia, Zhirinovski afirmó estar de acuerdo con la iniciativa, sosteniendo también que, en caso de que un inocente fuese condenado, el juez responsable de dictar la sentencia debía ser automáticamente sometido a pena de muerte él también. Simultáneamente propuso que las cárceles rusas albergaran solamente a aquellos delincuentes que habían cometido crímenes graves (homicidio, violación, robo, narcotráfico y fraude en gran escala), otorgándole otros tipos de penas a aquellas personas cuyos delitos fuesen considerados faltas menores.

Con respecto a la lucha contra la corrupción propuso una batería de medidas dirigidas no sólo a castigar a los corruptos sino también a premiar a los honestos que denunciaran las irregularidades.

El líder del PLDR estaba a favor de reformar la legislación nacional que regula la tenencia de armas de fuego para uso personal, considerando que los ciudadanos honestos tienen derecho a defenderse del mejor modo posible ante una amenaza de muerte.

Irredentismo e imperialismo

Aunque Zhirinovski visitó varios países asiáticos -como Irán, India, China y Taiwan- y se mostró a favor de que Rusia eliminara todas las restricciones que pudieran existir para relacionarse con los demás países del mundo, al mismo tiempo predicó el irredentismo y sugirió restaurar el Imperio Ruso, ampliando sus fronteras para conquistar territorios vecinos.

Debido a esa mentalidad en una entrevista de 1992 dijo:

Hitler es figura política importante en Alemania, a quien vimos bajo una luz ligeramente distorsionada. Por supuesto que algunos de sus hechos y acciones dañaron a Alemania. Algunas declaraciones ultrarradicales jugaron en su contra. Pero, en general, su ideología no contiene nada negativo en sí misma.

Su oposición al desmantelamiento de la URSS surgió a partir de su creencia que ello equivalía al desmembramiento de una entidad político-territorial que era anterior a la implantación del comunismo y a la cual los rusos llevaban siglos construyéndola. Por ese motivo era partidario de una reunificación de las antiguas repúblicas socialistas soviéticas bajo el mando de Moscú (sin embargo también creía que los vecinos de Rusia debían restaurarle a su país los territorios que eran suyos, motivo por el cual hizo declaraciones irredentistas que los convirtieron en una persona non grata en Ucrania, Kirguistán y Kazajistán; del mismo modo afirmaba que los rusos que habitaban en Estonia y Letonia debían ser activamente asistidos por el gobierno ruso, para que no se vieran obligados a migrar de unos países que, a causa de sus aspiraciones de ser occidentales, los consideran indeseables). Zhirinovski también hizo declaraciones a favor de la recuperación de Alaska por medio de la fuerza militar.

Según su concepción geopolítica, a Rusia le correspondía dominar a todos los territorios hacia el sur, ocupando especialmente Afganistán, Irán, Pakistán, Turquía, Siria, Israel y Arabia Saudita -del mismo modo sostenía que a Estados Unidos le correspondía dominar Iberoamérica, a Europa toda África, y a China y Japón el Sudeste Asiático y Oceanía. A su vez proponía una alianza de su país con Bielorrusia y Serbia, a la cual podrían unirse otras naciones eslavas que rechazasen la modernidad occidentalista.

Cuando comenzó su carrera política manifestaba una actitud amistosa hacia las minorías étnicas que habitan en Rusia, sin embargo con el paso de los años esa actitud fue cambiando. Por ese motivo, sobre todo a partir de 2008, comenzó a articular un discurso inequívocamente anti-inmigracionista, cuestionando especialmente la presencia de musulmanes en su país. Eso lo llevó a proponer que, para limitar el crecimiento del islamismo en el norte del Cáucaso, era necesario implementar una ley que redujese la tasa de natalidad de la región poblada mayormente por mahometanos, obligando a las personas a no tener más que un hijo. En 2016 declaró que una gran muralla en la frontera rusa podía servir para controlar el problema de la inmigración ilegal desde los países asiáticos.

Zhirinovski consideraba que el principal obstáculo para el despliegue de una política imperial en Rusia era la OTAN, por lo que se oponía totalmente a la idea de que Ucrania, Georgia o Finlandia se incorporasen a la organización. De hecho el político estaba a favor de consolidar y ampliar a la Organización de Cooperación de Shanghai como contrapeso al atlantismo.

Antisionismo

Hasta aproximadamente 2003, Zhirinovski expresaba abiertamente opiniones críticas hacia el sionismo. Solía afirmar, por ejemplo, que el modo habitual de operar de los sionistas era infiltrando a sus hombres en los gobiernos de las diversas naciones, para controlar y colonizar así a los pueblos sin que éstos se percaten de ello. Incluso señalaba que era innegable el desarrollo de un genocidio blanco, y que el sionismo es el cerebro detrás de tal fenómeno.

Empero su discurso comenzó a modificarse con el cambio de siglo, llegando a volverse hasta amistoso con la entidad sionista que infecta a Medio Oriente (su excusa era que en esos territorios habitan cientos de miles de rusos que deben ser protegidos). De ese modo dejó de insistir con su plan de conquistar Israel y expulsar a judíos y palestinos con el fin de sustituirlos por cristianos, para pasar a asegurar que Rusia debía apoyar al sionismo para combatir conjuntamente el crecimiento del terrorismo islámico.

Reformismo social

Curiosamente Zhirinovski cultivaba posiciones progresistas en materia social, pese a ser un declarado miembro de la Iglesia Ortodoxa Rusa. Un ejemplo de ello era su idea de legalizar la poligamia con la excusa de que así se podría revertir la crisis demográfica que atraviesa el país. Otra propuesta controversial era su idea de crear prostíbulos para que tanto varones como mujeres pudieran asistir, pero no para abiertamente satisfacer sus deseos sexuales, sino bajo el velo de recibir algún tipo de terapia. También sus posiciones con respecto a la homosexualidad resultaron inesperadas, puesto que era partidario de darle protección legal a las parejas del mismo sexo y se oponía a la ley para reprimir la propaganda elegebetista, afirmando que a la larga la misma sólo serviría para que se crease un polo político anti-ruso en torno al homosexualismo.

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